Dicen que el tiempo pone a cada uno en su sitio. Puede ser, no voy a discutir esta máxima, pero lo que sucede en los últimos años en el fútbol español permite hacer una reflexión y que cada uno afirme luego lo que considere más oportuno.
El exentrenador del Real Madrid José Mourinho se quejaba en su día del trato recibido por su equipo en los encuentros que protagonizaba ante el Barcelona. A colación hablaba de otros partidos disputados por el conjunto azulgrana ante diferentes rivales y enfatizaba su contrariedad y desacuerdo dejando caer un “¿por qué?” que lo decía todo sin decir nada.
Tras las insinuaciones del técnico luso y sabiendo lo publicado sobre el Caso Negreira –presunto delito de corrupción de la entidad culé con el exárbitro José María Enríquez Negreira entre 1994 y 2018 al pagarle cerca de ocho millones de euros– ahora la cuestión es aclarar si durante ese cuarto de siglo también fue perjudicado el Real Club Deportivo, que llegó a pelear por la totalidad de los títulos en juego con el mencionado Barcelona y luchó por evitar el descenso.