Se acabó el mercado. No se acabó el esperpento federativo con el Caso DUX pero, al menos, se acabó el pensar en ello durante unas jornadas. Se acabó la espera. El Depor debuta Hoy en Riazor. Por fin.
Hay muchísimas ganas. Tantas que creo que de los 19.000 socios blanquiazules pocos faltarán a la cita. Hay ilusión, confianza y deportivismo a raudales.
El pasado reciente nos ha invitado a aprender. Riazor ha vuelto a convertirse en el hogar de una familia. Un clan que volvió a llorar y volvió a sufrir hace pocos meses. Una tribu de colores blancos y azules que, tras hincar de nuevo la rodilla en tierra, se levantó, se alzó con fuerza y Hoy vuelve a su santuario.
Sí. Hemos aprendido. Hemos aprendido que juntos somos más fuertes, sobre todo cuando lo pasamos mal, y que poco o nada nos debe de importar lo que nos llega desde el exterior, sean chorradas, comentarios o bodrios federativos. La que importa eres tú, seguidora blanquiazul. El que importa eres tú, deportivista.
