José Luis Lemos, entrenador del Bergantiños, hizo balance de la victoria de su equipo contra el Arosa (2-1) en la última jornada de la primera vuelta, un derbi gallego disputado el pasado sábado en As Eiroas.
“Fue un partido muy nivelado, mejor de lo que yo me esperaba por parte de ambos equipos teniendo en cuenta la situación en la que llegábamos”, empezó explicando. “Teníamos cuatro o cinco bajas importantes y dos futbolistas que se pudieron incorporar el viernes a los entrenamientos. Hubo un esfuerzo grande por parte de ambos equipos. A nivel de juego, en el primer tiempo creo que pudimos hacer algún gol más que el 1-0 con el que llegamos al descanso. En el segundo, sufrimos. Estábamos condicionados en cuanto a dibujo por la gente que teníamos disponible. Tratamos de aguantar, de hacer el partido largo esperando a que entrasen jugadores de refresco y, al final, nos salió bien. Tuvimos un gran rival enfrente y muchas dificultades para ganar”.
1-5-3-2
Lemos explica la elección del sistema de cinco defensas. “No teníamos futbolistas por fuera. No teníamos a Boedo ni a Yelco, que llegaba con dos o tres entrenamientos, y tampoco a Lamelas. Elegí el dibujo con tres centrales porque no teníamos extremos y porque con los dos puntas podíamos hacer daño a la línea de cuatro del Arosa. Utilizamos ese sistema en algunos partidos pero el equipo está más cómodo con el 1-4-2-3-1, sobre todo ofensivamente porque tenemos las bandas más ocupadas y atacamos mejor por fuera. Una vez que nos empataron, se juntó todo: dimos minutos a los jugadores que llegaban con menos entrenamientos y aprovechamos para cambiar de dibujo. Iba a hacerlo ya con 1-0, pero el 1-1 me obligó a adelantarlo. Aún así, el 2-1 tendría que haber llegado antes porque sigo sin entender cómo se pudo anular esa acción y creo que el premio es justo”.
El míster del Bergan explica sus sustituciones. “Escobar tuvo dos o tres situaciones casi de mano a mano, alguna escorado pero con posibilidad de hacer gol. No acertamos pero para nosotros era vital, con ese dibujo y con las carencias que teníamos para atacar, que los delanteros entrasen mucho en juego por delante y esperar nuestro momento para poder tener el partido dónde nosotros estamos más cómodos: atacando por fuera. Una vez que entraron Remeseiro y Yelco nos dieron más profundidad pero, desde el lunes, el partido tenía toda la pinta de que iba a ser muy nivelado”.
También reconoce que el rival hizo daño a su equipo. “El Arosa detectó que, con nuestra línea de cinco, Cotilla tenía espacios por fuera. Sabíamos a lo que nos exponíamos y ya lo trabajamos así durante la semana. Queríamos ser fuertes por dentro pero sabíamos que nos podían hacer daño por fuera. Nos equivocamos en un centro-remate, que era algo que queríamos evitar, y fue también acierto del rival. Cuando vi que el partido estaba siendo demasiado incómodo para nosotros decidí cambiar el dibujo”.
Encomiable
José Luis Lemos también aprovechó la rueda de prensa posterior al encuentro frente al Arosa del pasado sábado para destacar el esfuerzo encomiable de sus jugadores. “Sé lo que es que los futbolistas estén diez o doce días en casa, alguno llegar dos días antes del partido. No tenía pensado darle minutos a Chapu, que se incorporó el viernes, pero por la lesión de Parga tuvo que jugar 20 minutos. Desconozco las dificultades del Arosa, pero sé las nuestras y hay que darle un diez a nuestros futbolistas por su esfuerzo”.
