Primer punto de la final para el Barcelona. La Liga se empieza a teñir de color azulgrana tras un primer partido en el que el Liceo aguantó con su plan hasta el minuto 37. Y estuvo a punto de salirle bien. Sin embargo, pagó muy caro sus errores de los que se alimentó un monstruo que, viviendo también de las individualidades de un genio como Ignacio Alabart, no tuvo piedad (6-3). Le faltó madurez en los momentos clave a los verdiblancos. Le sobraron un poco de nervios cuando tuvo que improvisar un nuevo plan. Pero quedan 48 horas para el siguiente envite (Palau Blaugrana, lunes a las 20.30 horas), hacer ajustes y volver a la batalla. Se resetea el marcador. Y sus opciones vuelven a ser las mismas.
La final empezó bien para el Liceo. Arnau Xaus cazó una bola muerta en el área en un dispiste de la zaga azulgrana. Con un buen movimiento, arrastró hacia un lado, se la colocó y batió a Carles Grau, el elegido por el equipo local para iniciar la serie. Apenas se había consumido un minuto y medio del partido. Pero tampoco le duró mucho más la delantera en el marcador a los verdiblancos con una gran acción de Ignacio Alabart, que con un disparo lejano sorprendió a Serra.
El empate seguía siendo buen resultado, pero solo era el minuto tres y no podía conformarse. Pero el mando a partir de entonces correspondió a los azulgrana, con un equipo coruñés que se dedicó a intentar parar el juego y a sufrir. Se le da muy bien resistir. Jugar ese papel de otorgar al contrario la iniciativa, juntarse atrás y aferrarse a la pista. Las ocasiones del Barça se sucedían, las más claras un palo de Ferrán Font y un mano a mano de Eloi Cervera. Como respuesta llegaron disparos de Fabrizio Ciocale, Jacobo Copa y Tato Ferruccio.
El Liceo no estaba cómodo y la mejor noticia es que seguía a la par en el marcador. La peor, un infortunio de Marti Serra que al final no tuvo consecuencias. El portero recibió un golpe involuntario de Pablo Álvarez, que le golpeó con el stick en el mentón. La sangre le manchaba incluso la camiseta, muy blanca. Le realizaron un aparatoso vendaje e inclluso llegó a salir Martín Rodríguez, aunque solo por dos segundos. Serra regresó y todo siguió con normalidad.
Y el mismo guión. El Barça seguía achuchando. Acechando. Font volvió a rozar el gol en una acción en el segundo palo, que fue el que evitó el gol de Marc Grau y Serra, sin miedo por su herida, despejó con el casco un fuerte chut de Font. Ya se vislumbraba el descanso, olía a empate. Pero siempre hay que contar con el talento desequilibrante de Alabart. Se le señaló una y otra vez en la previa. Por lo bueno que es. Y por lo que se motiva en los partidos contra el equipo de su ciudad. Y en una acción en velocidad por el flanco derecho, disparó, parecía que iba al primer palo, pero fue cruzado. Completaba la remontada con ese denominado gol psicológico cuando quedaba 1.15 para el paso por vestuarios.
El Liceo fue otro en el segundo tiempo. Salió a otra velocidad. Y sobre todo, con mucha agresividad. En apenas unos segundos llegó hasta tres veces a la portería de Carles Grau gracias a subir las líneas de presión y a los robos en media pista. Así llegó el mano a mano de Arnau Xaus y el rechace posterior de César Carballeira, con polémica porque como se vio en la repetición, Pablo Álvarez rechaza la bola dentro del área con el patín. Y a estas dos le siguió un 2x1 entre Xaus y Torres que se durmieron demasiado.
También fue protagonista el capitán en otra jugada polémica. Aragonés le cazó en media pista, pero el coruñés siguió. Los árbitros señalaron la falta, la hicieron subir, pero dieron ley de la ventaja cuando Torres llegaba muy desequilibrado. Si se hubiese tirado, posiblemente hubiese sido azul. Seguía mejor el Liceo, hasta que llegó la jugada decisiva. Los árbitros fueron castigándole con faltas hasta llegar a la décima. Momento clave.
Alabart, que había acertado todas sus directas en playoff y la mayoría precisamente en esos minutos calientes. No pudo con Serra y cuando el Liceo estaba celebrando que había salvado un nuevo match ball, llegó Font para tirar por tierra sus ilusiones con un potente disparo exterior. El golpe además fue doble. Catorce segundos después, Cervera volvió a aprovecharse de otro fallo defensivo para el cuarto. En un visto y no visto había caído el muro liceísta. Una película que ya se ha visto más veces.
Desde entonces hasta el final el Liceo tuvo varias ocasiones de reengancharse en el marcador, pero ya con un plan improvisado, y cada vez que lo conseguía, al minuto pasaba algo que se lo volvía a poner todo en contra. Primero hubo una azul a Llorca. No entró ni la directa ni se aprovecharon los dos minutos en superioridad. Sí que llegó el tanto verdiblaco con una gran asistencia de Torres a Bruno Saavedra. El capitán, de espaldas, sabía por donde venía su compañero, se dio la vuelta, se la pasó y el santiagués definió a la escuadra. 4-2 y quedaban siete minutos. Había vida.
Pero en el área contraria cada vez que pasaba algo era muy difícil que pasara desapercibido. Los colegiados señalaron penalti de Carballeira a Cervera. Pablo Álvarez acudió a su puntual cita con el gol contra el Liceo desde la pena máxima. Ya lleva 41 con la camiseta azulgrana en sus duelos contra su exequipo, 47 se se suman los que también marcó con el Befica. Apagado el contato de remontada. Tampoco las faltas sonreían al Liceo. Tres llevaban los culés en el segundo tiempo, 8 los coruñeses, que llegaron al segundo ciclo, a la decimoquinta, que otogó una nueva directa al rival. Font no pudo con Serra.
Pero el tiempo iba agotándose y con él las opciones de épica en la que hizo creer el tanto de Arnau Xaus y que el Barça cometió la décima. Juan Copa pidió tiempo muerto. La misión de los suyos era que forzaran esa opción de bola parada. Era verdad que ya no había nada que perder. Pero salió completamente al contrario. Barullo. Imprecisiones. Demasiados nervios. Y descoordinación que en una última jugada posibilitaron la sentencia local por medio de Llorca. 6-3. No había tanta distancia en el marcador.
Barça 6 - 3 Liceo |
Barça: Carles Grau, Ignacio Alabart, Sergi Llorca, Marc Grau y Ferrán Font -cinco inicial-. Xavi Barroso, Pablo Álvarez, Eloi Cervera y Sergi Aragonés.
Liceo: Martí Serra, César Carballeira, David Torres, Arnau Xaus y Bruno Saavedra -cinco incial-. Nil Cervera, Tato Ferruccio, Fabrizio Ciocale, Jacobo Copa y Martín Rodríguez.
Goles: 0-1, m.2: Arnau Xaus. 1-1, m.3: Ignacio Alabart. 2-1, m.23: Ignacio Alabart. 3-1, m.37: Ferrán Font. 4-1, m.37: Eloi Cervera. 4-2, m.43: Bruno Saavedra. 5-2, m.44: Pablo Álvarez, de penalti. 5-3, m.48: Arnau Xaus. 6-3, m.49: Sergi Llorca.
Árbitros: Miguel Díaz y Jonathan Sánchez. Mostraron azul a Sergi Llorca.
Incidencias: Primer partido de la final del playoff de la OK Liga disputado en el Palau Blaugrana. |