El Maristas recibe hoy (21.00 horas) en su pabellón al Miralvalle, segundo clasificado de la LF2, en la segunda ‘final’ por la permanencia del conjunto de Fernando Buendía, que la pasada semana ganó la primera en la cancha de Unibasket.
Por ello, la primera premisa del técnico coruñés es “llamar a la gente a que venga a echar un cable (la entrada es libre), que nos empuje en este reto tan bonito de conseguir dos victorias” en 48 horas. Porque el domingo el Maristas recibirá a otro ‘gallito’, el Costa Almería, equipo que cierra el top-3 de la competición.
“Es una semana atípica porque nosotros tenemos que pensar en dos partidos, mientras que nuestro rival solo piensan en el nuestro”, apunta Buendía, quien asegura que el rival de hoy “es un equipo con mucho talento individual, entre él una ex del Maristas, Amy Griffin, y una plantilla muy completa en todas las líneas. El fin de semana pasada consiguieron el billete para la fase de ascenso, y deberían estar ya pensando más en prepararla que en el partido contra nosotros, pero han dicho que quieren ganar lo máximo posible”.
Griffin lidera, con 16.8 puntos, 5.6 rebotes, 1.4 asistencias y 15.6 créditos de valoración, al potente conjunto cacereño, que cuenta con otras cinco jugadoras muy peligrosas: Irene Viruel (11.6 tantos y 8.6 rebotes), Ruth Adams (10.3 y 4.7), Ana Moyano (8.1, 2.6 y 2.6 asistencias), María Romero (6.8, 2.0 y 1.3) y Alicia Morales (5.7, 4.2 y 4.0). La primera de ellas, interior, presenta una curiosa estadística en triples: ha intentado 5 y ha convertido 4.
“Tenemos ilusión por el reto y muchas ganas de jugar –relata Buendía–. Hemos sacrificado parte de los entrenamientos de la semana para intentar llegar bien físicamente, ya que jugamos el domingo pasado y, además, el entrenamiento del martes fue bastante convulso. Tuvimos un pequeño susto con una jugadora, que fue llevada en ambulancia. Y han vuelto las lesiones. Laura Martínez se ha roto un dedo y en principio no podrá volver a jugar en lo que queda de temporada”.
“Es una pena después de haber recuperado a varias jugadoras, entre ellas la propia Laura, después de diez partidos sin jugar, nos gustaría poder contar con todo el mundo para este tramo final. Lo que nos queda es jugar con la gente sana, con la máxima energía, y a ver si somos capaces de estar tan bien como en Logroño (el pasado domingo) a nivel defensivo, y que nos permita sacar las dos victorias en nuestra casa”, finalizó Fernando Buendía.
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