El Deportivo Liceo cuenta en su plantilla para la temporada 2023/2024 con cuatro jugadores naturales de la provincia de A Coruña, la segunda cifra más alta –repetida otras ocho veces– en las 45 consecutivas que lleva habitando en la máxima categoría nacional.
El póker que forman Dava Torres, César Carballeira y los recién llegados Pablo Cancela y Bruno Saavedra (nacido en Santiago de Compostela) toma el testigo del que compusieron en la 18/19 Torres, Martín Garaboa y los hermanos Lamas, Josep y Edu.
Un curso antes, el equipo verdiblanco contó con el máximo número de coruñeses en su periplo en División de Honor/OK Liga: los cuatro citados anteriormente más César Carballeira, que regresaba de dos años en el Reus Deportivo.
El repóker de jugadores de la tierra se ha repetido otras tres veces. En la 94/95 –entonces en una plantilla con 11 elementos–, con Gelasio Garea, Willy Duarte, Fernando Avecilla, Diego de Santiago y Óscar Castellanos. En la 97/98, campaña en que el técnico Carlos Gil llegó a utilizar 15 jugadores, el quinteto local lo integraron Toni Fernández, Willy Duarte, Chus Gende, Josep Lamas y Diego Dono, mientras que en la 01/02 Gil contó entre sus mimbres con Luis Rodríguez, Josep Lamas, Diego de Santiago, Chus Gende y Josama Alén.
En el otro lado de la balanza está la 88/89: dos madrileños (José Luis Huelves y Carlos Figueroa), dos asturianos (Kako Álvarez y Celso González), dos argentinos (Daniel Martinazzo y Roberto Roldán), dos catalanes (Kiko Alabart y Fernando Pujalte). Y nada más. Es la única sin un solo jugador nacido en A Coruña.
En la siguiente, Willy Duarte fue el único representante local, lo mismo que el meta Alberto Galmán en la 81/82, la otra las 45 en la elite nacional con un solo coruñés.
De 2.1 a 2.9
La media en las 21 campañas disputadas en el siglo XX fue de 2.1 jugadores coruñeses, mientras que en las 24 del siglo XXI ha ascendido a 2.9, un reflejo de la influencia del Liceo en el aumento de fichas derivado de los éxitos en la década de 1980 del equipo deportivo gallego más laureado de la historia, que además ha suministrado mimbres –no todos pueden ser profetas en su tierra– a conjuntos de los países más relevantes de Europa en el hockey rodado.
Uno de ellos es Pablo Cancela, que con 35 años regresa a su club nodriza. Jugó varios partidos con el primer equipo, siendo del filial, en la 05/06 y la 06/07. A partir de ahí, Vigo Stick (2 campañas), Cerceda, Alcoi, Forte dei Marmi (5), Oliveirense (3), Follonica, Bassano (3) y de nuevo Follonica. Por fin tendrá ficha profesional con el club de su ciudad.
Con él y Saavedra el Liceo dobla la apuesta de la temporada pasada, donde Torres y Carballeira fueron los únicos jugadores de la casa.
