La OK Liga regresa al Palacio de los Deportes de Riazor 107 días después del tercer y definitivo partido de la final del pasado curso contra el Barça. Una semana después de caer en otra final ante los azulgrana, la de la Supercopa de España, inicia el sábado 30 su nuevo camino en el torneo de la regularidad.
Enfrente estará el Igualada Rigat Hoquei Club, un histórico del hockey sobre patines nacional, cinco veces campeón de liga (la última en 1997) y otras seis de la Champions (la más reciente en 1999), entre otros títulos. Lejos de aquel equipo que dominó en España y en Europa, el actual Igualada tiene objetivos más modestos.
La pasada temporada jugó la Copa del Rey y los playoffs de la OK Liga. En el torneo del KO se cruzó con el Barça y en las eliminatorias por el título de liga se enfrentó precisamente al Liceo. Y los verdes necesitaron una prórroga para lograr la primera victoria en Riazor (5-4).
Sin confianzas
Por eso no se fía Juan Copa de la primera piedra en el camino para su equipo: “El Igualada es fue, sin ninguna duda, el equipo revelación de la OK Liga el paño pasado y nos tuvimos que cruzar en los cuartos de final de los playoffs. Es un equipo que mantiene prácticamente todo su bloque, un bloque joven, con mucha calidad individual y muy atrevido”, avisa el técnico.
“Por ahí vendrá el peligro mañana (por el partido de hoy)”, insiste Copa, que pide solidez y olvidar cuanto antes la final de la Supercopa: “Tenemos que ser un equipo sólido, como hemos demostrado en la pretemporada y el pasado fin de semana en la Supercopa, que tenemos que aparcar y centrarnos con mucha concentración para empezar con buen pie y sumar los primeros tres puntos”.
Con los diez jugadores de la plantilla disponibles, la principal duda del cinco inicial está en la portería. Parece que Tiago Rodrigues ha tomado la delantera sobre Martí Serra, pero el entrenador coruñés podría rotar. En el Igualada, el nuevo técnico Marc Muntané tendrá que hacer un descarte antes del partido. La plantilla es casi idéntica a la del pasado curso, con la única incorporación del francés Marc Rouzé.
