Después del muy meritorio, muy trabajado y muy necesario triunfo en la complicada cancha del Gipuzkoa, el Leyma Basquet Coruña regresa este viernes (21.00 horas) a Riazor para afrontar un compromiso de cariz opuesto, ya que recibe al colista, el CB Clavijo.

El conjunto riojano, que acumula 8 derrotas consecutivas, está pagando cara la falta de bagaje en la categoría de su plantilla, en la que hay 8 jugadores que ascendieron el pasado curso desde la LEB Plata, donde también jugaron Pau Treviño, Ismael Tamba y Juan Coffi. Este último y David Knudsen son los únicos con experiencia previa en Oro. El escolta en el Prat (21/22) y el alero danés la pasada campaña en el descendido Albacete. 

El grupo entrenado por Jenaro Díaz ganó al Betis (62-56) en la jornada 2 y al Menorca (64-55) en la 4. Su otro mérito principal es haber plantado cara al Estudiantes (73-77).

El gran problema del Clavijo, además de la mencionada falta de experiencia, está muy claro: su ataque no funciona. En 9 de los 12 partidos disputados hasta la fecha no llegó a 70 puntos y en 4 de ellos no pasó de 59. Sus guarismos anotadores son, de largo, los peores de la competición.

Así es difícil sacar algún tipo de rédito de una buena defensa, la cuarta mejor de Oro. Sólo los dos primeros, Burgos y Estudiantes, y el quinto, Gipuzkoa, han encajado menos. Cifras que, no obstante, tienen truco, ya que el cuadro logroñés practica un baloncesto muy lento, de pocas posesiones, por lo que una de las claves de esta noche es que el Leyma imponga su alto ritmo.

Javier Nicolau (12.3 puntos y 6.2 rebotes) es el único que alcanza los dobles dígitos en anotación. El que más se acerca es Andre Norris Jr (7.9 y 4.5). Ninguno de los otros 10 miembros de la plantilla supera los 7 tantos por partido. Es tal el desequilibrio entre ataque y defensa que, pese a los buenos números atrás, el Clavijo presenta un alto déficit, 14.3 puntos, en el promedio global.

Además de en la tabla, los de Jenaro Díaz son colistas en tres apartados estadísticos: puntos a favor, acierto en triples (26.2%) y balones perdidos (15.2). Penúltimos en tiros libres (64.0%) y valoración (55.0). Y antepenúltimos en tiros de dos (47.7%).

Y además de la defensa, sus otras virtudes radican en el rebote ofensivo (10.3 por encuentro, la tercera mejor marca de la competición) y en los balones recuperados (7.4, sexta mejor cifra).

Diego Epifanio cuenta con sus 12 hombres para afrontar el asalto a su noveno éxito del curso. Una teórica jornada de calma a sólo cinco días de una teórica tempestad, la visita al Estudiantes (10-2).