En la mañana de este miércoles el Leyma Básquet Coruña ha anuciado que Diego Epifanio dejaba de ser entrenador del equipo. "Una vez separados nuestros caminos, quería agradecer a todas las personas que me han acompañado en esta experiencia tan especial, en la que he tenido la suerte de dirigir al Club Básquet Coruña". Así comienza su carta de despedida. Pocos minutos después de hacer oficial su salida, la entidad coruñesa ha publicado en sus redes sociales un extenso comunicado que el técnico burgalés quería transmitir todos los que forman la familia naranja.

En primer lugar, da las gracias a toda la Junta Directiva de la temporada pasada por haber apostado por él para llevar a A Coruña a la ACB. Y lo consiguió. A pesar de que el sueño solamente duró un año, el 10 de mayo de 2024 el Básquet Coruña ascendió a la máxima categoría del baloncesto español por primera vez. Epi continúa el escrito agradeciendo a la actual dirección, a toda la gente de la oficina, a los responsables de Administración, al departamento de Marketing y Comunicación, al de Operaciones y Eventos y a "todas las personas que han participado y ayudado para que todos pudiésemos disfrutar en los días de partido", afirma.

El técnico también ha querido echar la vista atrás y ha tenido palabras para el Ayuntamiento de A Coruña, para el Hockey Club Liceo, para su técnico, Juan Copa, y para recordar su estancia en el Palacio de los Deportes de Riazor: "Quería agradecer la cordialidad con la que hemos convivido con el Liceo. Un gran club dirigido por un gran entrenador. Juan, no es fácil ser profeta en tu tierra y tú lo estás bordando. Gracias Manuel por tu cercanía. Enhorabuena por tus tres ascensos como concejal la temporada pasada".

Epi continúa su despedida mencionando a la cantera del club y a todos los que trabajan con ella día a día, y en ese momento es cuando llega el adiós a sus jugadores. Y aunque comienza pidiendo perdón por no mencionarlos a todos, sí hay varios nombres que se pueden leer entre sus palabras: Javi, Loti, Álex, Ingus, Aleix, Olle, Yunio y Atou. "Tengo que hacer mención especial a los jugadores con los que he compartido mis tres años en el vestuario. Gracias por vuestros sacrifios y esfuerzos para entrenar y jugar, y por soportarme y vivir juntos este camino", escribe. 

Finalmente, y una vez agradecido con todos los miembros que forman el staff y de prensa, es el turno para la afición. "Muchas gracias por vuestro apoyo incondicional a pesar de que en algún momento seguro que se os ha hecho difícil esta temporada no perder el ánimo", comienza. "Tras esta chapa solo me queda desear toda la suerte del mundo a la gran familia naranja y a todos los que la componen. Os llevaré en el corazón, ojalá nuestros caminos se vuelvan a juntar", finaliza.