¿Por qué en el fútbol se dan más victorias locales que visitantes? ¿No son los mismos equipos enfrentándose entre sí, primero en un campo y en la segunda vuelta en otro? ¿Qué provoca que los clubes obtengan mejores resultados en casa? En teoría no tendría porque ser así, pero el fútbol no solo son 22 jugadores dándoles patadas a un balón despojados de cualquier componente emocional.
El conocimiento del terreno de juego, el ambiente del público, el estado del césped, las dimensiones del campo y, por supuesto, la seguridad que supone el sentirte en territorio conocido son algunos de los aspectos que inclinan la balanza a favor del equipo local.
En los duelos entre el Boimorto y el Atlético Arteixo parece que estos elementos han sido hasta ahora insalvables para el club que actuaba como visitante. Estos dos equipos, que se enfrentarán pasado mañana en O Carballal (18.00 horas), se han visto las caras en cuatro ocasiones en liga en las dos últimas temporadas y en todas ellas la victoria cayó del lado local. Además, la mayoría de ellas han sido por más de un gol de diferencia (3-0, 3-1, 1-0 y 3-0)..
Arteixo y Boimorto se midieron en la temporada 2017/18 después del ascenso de Primera a Preferente del cuadro de O Carballal. El cuadro rojiblanco ejerció de anfitrión en el primer enfrentamiento entre ambos e hizo valer el factor campo (3-0) con goles de David Castro, Mauro y Dapo.
Una vuelta después, concretamente en la jornada 32, el Boimorto devolvió el golpe en O Carballal (3-1). Otero adelantó al Arteixo pero los tantos de nacho, Julito y Joseba le dieron la vuelta al marcador.
Más de lo mismo
La campaña siguiente se repitió la fórmula. Jornada inaugural, partido en Ponte dos Brozos entre ambos y triunfo del Arteixo (1-0) con una solitaria diana de Nano ante un Boimorto que jugó los últimos 17 minutos con diez jugadores por la expulsión de Jorge.
El último duelo liguero entre Boimorto y Arteixo tuvo lugar en O Carballal en la jornada 20 del pasado curso. El conjunto local se desmelenó (3-0) con tantos de Joseba, Neto y Andrés en un partido que terminó con cuatro expulsiones, dos por bando (Figu y Gonzalo por el Boimorto y a Chechu y Javucho por el Arteixo).
