El Mirandés inicia una nueva etapa con un equipo completamente nuevo, ya que solo un jugador tiene actualmente contrato en vigor, el central Juan Gutiérrez. Durante la temporada 23-24 el equipo rojillo tenía trece futbolistas cedidos en su plantilla. Alfredo Merino, director deportivo del club, se enfrenta al reto de encontrar un nuevo entrenador que recoja el testigo de Lisci y confeccionar un grupo competitivo de cara a la próxima temporada.
El técnico Alessio Lisci se ha despedido este lunes del Mirandés después de dos temporadas en las que no sólo ha logrado el objetivo de la permanencia, sino que ha rozado el ascenso a Primera División en esta última campaña, la de su marcha después de sumar más de ochenta partidos con los de Anduva.
El presidente del club, Alfredo Miguel, ha confirmado la salida voluntaria del técnico romano, formado como entrenador en las categorías inferiores del Levante UD, fogueado en el Mirandés y que ahora dirigirá a Osasuna en Primera División, que ha pagado los 400.000 euros de la cláusula de rescisión del técnico, que firmaría hasta 2027.
Nacido en Roma en 1985, Lisci ha dejado huella en el conjunto rojillo tras una primera campaña en la que tuvo que pelear hasta el final para asegurar la permanencia, un objetivo que logró en la última jornada, algo que dio la confianza a la dirección deportiva del club rojillo que continuase un año más al frente del proyecto.
Sin embargo, el rumbo cambió radicalmente esta temporada durante la que el equipo se mantuvo durante muchas jornadas en la parte alta de la tabla, incluso liderando la clasificación en varios tramos, hasta convertirse en uno de los candidatos firmes al ascenso.
Con este rendimiento, Lisci ha reforzado su prestigio dentro de LaLiga Hypermotion y volverá a tener la oportunidad de dirigir en la máxima categoría del fútbol español, donde ya tuvo una experiencia previa con el Levante en la temporada 2021-2022, primero como interino/sustituto y luego confirmado hasta final de campaña.