El Deportivo y el Fuenlabrada se reencuentran en Primera Federación con cuentas pendientes y urgencias este sábado (19:00 horas) en el estadio Abanca-Riazor, en el que los madrileños no pudieron presentarse por un brote de Covid en julio de 2020 para cerrar una temporada en la que los blanquiazules confirmaron su descenso a la categoría de bronce por primera vez en 40 años.
"Sólo fútbol" y un apretón de manos fue el tuit del Fuenlabrada este jueves a dos días de la visita a Riazor para pasar página a lo sucedido hace tres años, pero en A Coruña nadie ha olvidado la triste jornada que acabó con su equipo en la tercera categoría, donde sigue.
El Fuenlabrada viajó entonces a Galicia con un brote de Covid, no pudo jugar en Riazor y tuvo que quedarse en A Coruña un par de semanas aislado en un hotel por culpa del virus. El partido se aplazó, pero no así el resto de la última jornada de LaLiga SmartBank 2019/20, que estaba prevista en horario unificado, y el Deportivo descendió por las victorias de Albacete y Lugo.
A principios de agosto, con el Dépor ya descendido, aunque luchando por la permanencia en los despachos, sin conseguirla, el Fuenlabrada perdió en Riazor el billete a la promoción de ascenso. Ahora, se reencuentran en Primera Federación, a la que bajaron los madrileños el curso pasado.
Al morbo por el pasado se suman las urgencias del presente, las del Deportivo por no perder el tren del ascenso directo y las del Fuenlabrada por evitar el segundo descenso consecutivo.
Los coruñeses, solventes en su campo, donde sólo perdieron un partido y no han caído con Óscar Cano como entrenador, han cedido demasiados puntos a domicilio. El técnico está cuestionado por la afición y una derrota podría costarle el puesto.
La de la semana pasada (2-1) ante Unionistas de Salamanca la semana pasada ha dejado a los deportivistas a cuatro puntos del líder, el Alcorcón y les ha hecho perder dos posiciones, hasta la cuarta. No pueden permitirse un error ante el Fuenlabrada.
Los madrileños han resurgido en las últimas jornadas (cuatro triunfos en los siete últimos partidos) y el que lograron ante el Rayo Majadahonda la semana pasada les sacó de las posiciones de descenso, aunque solo tienen dos puntos de renta.
En el bando coruñés, Roberto Olabe, que fue expulsado ante Unionistas, no podrá jugar por sanción y Pepe Sánchez causa baja por lesión.
Al once regresará Antoñito Regal tras haber cumplido un partido de castigo por acumulación de amarillas y Diego Villares pasará a la. medular tras haber tenido que actuar como lateral.
La continuidad de Kike Saverio en el once está en el aire y Óscar Cano podría incorporar a un segundo delantero (Max Svensson o Arturo Rodríguez), o dar entrada en el once a Rubén Díez, suplente en Salamanca.
