Estuvo más cerca que nunca, pero la primera victoria liguera de la temporada se sigue haciendo esperar. El Dépor Abanca empató con el Athletic Club (2-2) tras un igualado y emocionante partido en el que supo resistir cuando sufrió y golpear cuando tomó el control, pero donde un error final (en jugada polémica) le privó de sumar los tres puntos. Olaya y ADT fueron las autoras de los goles, pero la protagonista para lo bueno y para lo malo fue Inês Pereira. Salvadora en tres ocasiones y a quien se le escapó el balón y la victoria de entre las manos cuando el partido ya se encaminaba al tiempo de descuento.

Irene Ferreras realizó dos cambios con respecto a las once jugadoras que partieron de inicio la semana pasada ante el Betis. Sentó a Hmírová y Bárbara para dar entrada a Ainhoa, ya con rodaje tras la lesión que sufrió en pretemporada; y a Olaya Rodríguez, que disfrutaba así de su primera titularidad como deportivista. Fue un cambio de piezas, pero no de dibujo (4-3-3), ya que ambas ocuparon posiciones de banda.

El partido comenzó mal para los intereses del Dépor. La puesta en escena del Athletic fue muy buena y llevó la manija del partido durante un cuarto de hora en el que tuvo ocasiones para adelantarse. Curiosamente la más clara de todas llegó en el minuto 1. Centro desde banda izquierda y remate de cabeza de Azkona en la línea del área pequeña que salva Inês con la pierna izquierda. Espectacular la acción de la guardameta lusa. Poco después, el conjunto bilbaíno dispuso de un peligroso lanzamiento de falta. Nerea Nevado lanzó con la zurda y logró que el balón superara la barrera, pero se topó con otra intervención de Inês, que despejó a córner.

El Athletic monopolizaba el balón con un centro del campo de cuatro (en rombo), que hacía dudar al Dépor. Lo mejor que le pudo pasar a las blanquiazules fue que el partido se parara por unas molestias de Elexpuru. Ahí Irene aprovechó para ajustar las marcas e incluso se vio a las propias jugadoras hablando dentro del terreno de juego. A partir de ahí y hasta el gol, el equipo coruñés comenzó a estirarse poco a poco. Primero con un centro fuerte de Millene que repelió Nanclares y después con un tiro blando de Ainhoa Marín. Mejores sensaciones, pero faltaba una primera gran ocasión.

Y para que necesitas más si puedes acertar a la primera. Eso hizo el Dépor tras una jugada combinativa, como le gusta. Ante la presión alta del Athletic, Inês optó por sacar el balón en largo, hacia banda derecha. Parecía que se iba a perder, pero Ainhoa metió la bota para salvarlo y orientarlo bien. Levantó la cabeza y encontró a Paula, que superaba la línea del centro del campo. Y la centrocampista de Viladecans pasó para Cris, que se la devolvió y sacó un centro de primeras que esperaba Olaya. No había participado demasiado la jugadora cedida por el Real Madrid, pero le ganó la posición a Elexpuru y metió con habilidad la cabeza para superar con una vaselina a Nanclares, vendida al quedarse a media salida. 

El gol dio confianza al Dépor. No como para generar ocasiones, pero sí para que sus laterales y centrales despejaran sin despeinarse los constantes centros al área del Athletic, táctica con la que intentaron sin éxito igualar el partido antes del descanso.

Nuevo inicio fuerte

Un guion similar al de ese último cuarto de hora habría beneficiado al Deportivo, pero la segunda mitad inició como la primera, con un Athletic muy fuerte. Tanto como para esta vez sí hacer gol. Una diana que llegó en una falta directa que Maite Zubieta lanzó con mucha calidad, acabando con la resistencia de Inês.

Se tambaleó durante unos minutos el cuadro herculino y el Athletic aprovechó para seguir insistiendo. Nahikari disparó fuera y minutos después el Dépor volvió a ser salvado por su portera, que despejó un potentísimo tiro de Zubieta desde fuera del área. La jugada venía de una larga acción embarullada, muestra de que el Dépor estaba sufriendo mucho.

Pero las de Irene Ferreras acostumbran a rehacerse, a pasar el mal momento y luego volverlas a tener. Una capacidad reseñable de girar el partido hasta el punto de merecer y, lo más importante, conseguir un nuevo tanto. Llegó tras un aviso de ADT y otro de Ainhoa, que sentó a la defensora del Athletic en el área pero con poco ángulo no logró encontrar la portería.

Cuando ya no falló el equipo blanquiazul fue en el minuto 83. Millene tuvo tiempo para pensar y envió un pase al espacio que dejaba sola a ADT. Sacó un disparo raso y ajustado al palo izquierdo ante el que nada pudo hacer Nanclares.

Parecía ganado, pues el Dépor estaba controlando bien los minutos posteriores al gol, pero un córner dejó con la miel en los labios a las blanquiazules. Y estropeó un partido hasta entonces perfecto de su portera, a quien se le escapó el balón de las manos y vio como Valero no le perdonaba. La guardameta pidió falta y el público terminó enfadado con la colegiada, despedida entre gritos de "fuera". Por el momento las decisiones grises no están cayendo a favor del Dépor. Tampoco la primera victoria, que se sigue haciendo esperar. Y eso que en el 96 aún buscó ADT una vaselina que se perdió por arriba. 

Es un nuevo empate, como ante el Betis, pero de los que hace más afición, con goles. Y de los que puede generar confianza, porque las rojiblancas terminaron en quinta posición el pasado curso.