La Liga F ha vuelto ha dejar un nuevo caos en la jornada que, a priori, sería unificada. Todo estaba previsto para que, en la penúltima cita del campeonato, los encuentros diesen inicio el domingo a las 12.00 horas. Sin embargo, solo dos partidos iniciaron a esa hora, uno de ellos el disputado en Riazor entre Deportivo y Sevilla; el otro, en la Ciudad Deportiva Luis del Sol, entre Betis y Barcelona.
La primera ficha del dominó cayó en Lezama. El choque entre el Athletic Club y el Espanyol, en el que el conjunto bilbaíno buscaba la carambola para meterse en puestos de Champions League, empezó a las 12.17 horas. Un incidente en la grada, previo al inicio de la contienda, obligó a la ambulancia presente en la ciudad deportiva a trasladar a un asistente al hospital, según anunció el club vasco en sus redes sociales. La colegiada del encuentro se vio obligada a retrasar el inicio hasta que una nueva ambulancia llegase a las instalaciones.
Justo antes, a la hora prevista y estipulada por la Liga F, dieron comienzo el Dépor-Sevilla y el Betis-Barcelona, ajenos a los problemas que había en Lezama. Desde la entidad, trataron de frenar el inicio del resto de encuentros, aunque en A Coruña y en Sevilla, el mensaje que no llegó a tiempo.
Trece minutos más tarde de arrancar los partidos en Riazor y en la Ciudad Deportiva Luis del Sol, comenzaron el resto de partidos que, sin razón aparente, no esperaron a que empezarse el choque entre Athletic Club y Espanyol. Los duelos Real Madrid-Costa Adeje Tenerife, Eibar-Atlético de Madrid, Levante Badalona-Valencia, Levante-Madrid CFF y Real Sociedad-Granada arrancaron a las 12.13 horas. Así fue como se pasó de tener un único horario, a tener tres: 12.00, 12.13 y 12.17.
En el minuto 6, el Barça ya ganaba 0-2 al Betis. De esta forma, en el momento en el que comenzaron la mayoría de partidos, todos podían intuir de forma evidente su futuro en la Liga F: el Real Madrid se quedaría sin título y la escuadra verdiblanca estaría descendida; Madrid CFF, Espanyol, Levante Badalona y Levante ya tenían la salvación de forma matemática, incluso sin puntuar.
Mientras en Riazor la contienda ya encaminaba el descanso, en Lezama no se había cumplido ni la media hora de partido. Jugadoras del Deportivo y del Sevilla se marcharon a vestuarios y, con eso, llegó el anuncio por megafonía del club blanquiazul: el descanso duraría media hora, en vez de quince minutos. La razón, poder iniciar la segunda parte de la supuesta jornada unificada a un mismo tiempo.
Tras finalizar los encuentros y conocerse ya el desenlace de todos los equipos de Liga F, el Deportivo escribió en sus redes sobre el incidente, lamentando los desajustes y la mala organización de la competición.