Los días avanzan y la dirección deportiva del Deportivo trabaja en la elaboración de la plantilla de la próxima temporada. Mientras los demás equipos de la Liga F ya han anunciado numerosos movimientos, la entidad blanquiazul, por lo de pronto, solo ha hecho públicas las salidas de ADT, Pancha Lara, Hmírová, Nkor y Bennett. Las decisiones por tomar todavía son varias y, entre ellas, aparece en escena el regreso de Ayaka Noguchi.
La nipona se marchó cedida a finales de agosto. Puso rumbo al Sporting de Huelva para ganar rodaje en la categoría de plata, tras superar una lesión de gravedad en su rodilla izquierda. El anuncio de su cesión llegó de la mano del de renovación. Un mes antes de arrancar la campaña 2024-25, el club herculino hacía pública la renovación de Ayaka hasta junio de 2026 y, en el mismo comunicado, informaba de que la mediocentro se marcharía al Sporting de Huelva en calidad de préstamo.
Ayaka Noguchi (Saitama, Japón, 1995) recaló en las filas del Deportivo para reforzar la plantilla de cara a la temporada 2023-24, que afrontaba el objetivo de ascender a Liga F.
Se convirtió en el cuarto fichaje del cuadro coruñés tras Clara Rodríguez, Sara Debén y Laurina. Firmó tras varios años en el territorio nacional, al que llegó en 2019 de la mano del Espanyol. Seguramente dada su trayectoria en el fútbol español, su adaptación al Dépor fue rápida. De hecho, disputó las 14 primeras jornadas ligueras e incluso partió como titular en diez de ellas. Se consagró como inamovible en el centro del campo y formó una buena dupla con Henar, con la que demostró entenderse a la perfección.
Con lo que no contaba Ayaka, ni tampoco Irene Ferreras, entrenadora del Dépor por aquel entonces, era con un contratiempo que la tendría apartada del verde durante varios meses. La nipona sufrió una lesión en el ligamento lateral externo de su rodilla izquierda. En un principio, los servicios médicos del club optaron por un tratamiento conservador, pero dados los resultados, Noguchi terminó pasando por quirófano para solucionar los problemas.
La lesión la alejó de los terrenos de juego durante lo que restó de temporada. Tanto que se marchó al Sporting de Huelva sin volver a vestir la elástica del Deportivo. Fue con el equipo onubense con el que volvió a jugar. Regresó a los campos en la jornada 4 de Primera Federación, ante el Osasuna y, aunque el duelo acabó con derrota (1-3), el partido dejó como buena noticia su vuelta.
La temporada con el Sporting de Huelva le sirvió para recuperar sensaciones como futbolista profesional, algo necesario después de un ejercicio complicado por la lesión.
Sin embargo, en el plano general, el objetivo estuvo lejos de cumplirse. Ayaka disputó 18 partidos ligueros, siete de ellos como titular, pero la nipona no fue quién de evitar el descenso de categoría de su equipo. La escuadra onubense solo sumó ocho puntos de 78 posibles. O lo que es lo mismo, solo fue capaz de puntuar en seis encuentros de 26. Ganó uno y empató seis.
Ahora, tras una temporada con sabor agridulce, el Deportivo suma a su lista una decisión que tomar con Ayaka. Los caminos son dos: ofrecerle la oportunidad de completar su último año de contrato como futbolista blanquiazul o buscarle una nueva salida, bien sea otra vez como cedida, o incluso como traspasada.