Derrota ante el Llanera de un Bergan que sigue en la cuarta posición

Tercera jornada sin ganar de un Bergantiños que apenas ha conseguido sumar un punto y que ha sido incapaz de perforar la portería contraria en esos tres partidos. Los de José Luis Lemos fueron la última víctima de un Llanera que no pierde en su ‘futbolín’ del Pepe Quimarán desde hace cinco meses y que, gracias a eso, ha ido escalando posiciones hasta terminar la jornada en el puesto de promoción por la permanencia.

Tras un primer tiempo en el que lo más destacado fue un libre directo que Chapu Brunet estrelló en el larguero, Romaric y Viti cocinaron la acción del primer gol de Martín Pérez, que ya había marcado en As Eiroas. El propio Viti aprovechó un servicio de Marcos Arango para ajusticiar a los de Carballo en los minutos finales. Pese a la derrota, el Bergan se mantiene en puestos de promoción de ascenso.

Salió fuerte el equipo local, que pudo marcar en un córner muy cerrado de Matías que cabeceó Espinar y Santi Canedo despejó con muchos apuros. Replicó Escobar, tras un error en la salida de balón de Víctor, pero su disparo lejano se marchó alto. Luego llegó otra ocasión en la que, con Mapisa batido, Espinar evitó el 0-1 sobre la línea de gol y el disparo a la madera del Chapu. Pero la más clara fue un paradón estilo balonmano de Mapisa a Boedo, justo antes del descanso.

En el minuto 52, Romaric penetró por la banda derecha y, desde dentro del área y con Brunet sobre el césped y Brais superado, dio el pase de la muerte al punto de penalti, donde Martín controló con la zurda, se acomodó ante la pasada de frenada de Blas y Uzal y definió con el interior de la derecha a la izquierda de Santi.

Tras el primer gol de Martín, el Llanera se replegó y cedió el control del juego a los encarnados, cuya única ocasión reseñable fue una nueva parada del portero zimbabués del equipo asturiano a Yelco.

Y, a falta de diez minutos, llegó la sentencia de Viti, en una acción a balón parado colgada desde el centro del campo que pilló descolocada a la zaga carballesa. Santi desvió de puños a la altura del borde del área pequeña y Viti conectó una espectacular volea imparable para el meta carballés.