Con entrega nos llega. El Depor disputó ayer una de las mejores primeras partes en lo que va de temporada; qué falta nos hacía ver empezar así a los blanquiazules golpeando en la mandíbula al rival y noqueándolo en apenas doce minutos de partido. Con dos goles de ventaja no se bajó los brazos, Aguirre y Antoñito se vinieron arriba y hubo intensidad hasta que el colegiado del partido señaló el fin del primer acto en Riazor.
La UD Logroñés llegó a Riazor con la necesidad de recortar distancias con el Deportivo al buscar una plaza en los playoffs de ascenso. El duelo era una prueba de fuego para el equipo riojano y los tempraneros goles de Antoñito y Lapeña lo dejó fuera de combate en los primeros cuarenta y cinco minutos.
Quiles falló un penalti en la reanudación del partido y luego se pudo sacar la espinita anotando el tercero de la cuenta blanquiazul. En definitiva, el de ayer fue una puesta en escena perfecta: las peñas celebraron su día grande y una ‘selección’ de nuestros sanitarios del CHUAC hicieron el saque de honor. Un sábado perfecto.
