El Depor ABANCA volvió a batir récord de asistencia en Riazor para regalarnos el ascenso a Primera. Estamos de vuelta, grandes equipos que a día de hoy disputan torneos como la Champions League nos esperan para batirnos en duelo. El fútbol nunca se ha escrito sin F y hemos subido para quedarnos. Ahora más que nunca es necesaria la afición blanquiazul. Estar en Primera sería sinónimo de jugar cada fin de semana en el estadio y no en Abegondo y eso depende de nosotras y nosotros, del compromiso de la hinchada. Si cada quince días igualamos las 14.057 personas que asistieron al encuentro, podremos demostrar que las chicas sí venden y que esto es sostenible.
Este ascenso es el primero de tres. ‘O noso deporte’ está en auge más que nunca y la ciudad de A Coruña está camino de consolidarse como la referencia del deporte gallego. El Deportivo masculino se encuentra en una posición más que privilegiada para conseguirlo esta temporada. La mentalidad, los resultados, el sentimiento de la piña, el peso de los colores en la camiseta… Hemos sufrido demasiado y nos lo merecemos. ¿Podremos conseguirlo para el 12 de mayo? Pondríamos la guinda en un pastel que se celebraría por todo lo alto. Esta hinchada nunca se rinde y estará con el equipo pase lo que pase. Continuaremos dando lecciones de apoyo y de sentimiento. Como dijo Irene el domingo: “No se entiende lo que es una afición si no has vivido esto”.
Pero no todo es fútbol. El Leyma es líder en la LEB Oro (segunda división nacional de baloncesto) con una victoria más que los cuatro siguientes. De continuar en esa posición hasta el mes de junio, ascendería directamente a la Liga ACB. De no ser así, disputaría un ‘playoff’ que terminaría con formato de ‘final four’. Lo que está claro es que cada vez hay más ambiente en el Palacio, sobre todo de público joven e infantil, lo que hace presagiar una gran cantera de aficionados. Esos que en el futuro serán la base de todos los logros que se puedan conseguir.
Por el momento, aunque uno ya está conseguido, quedan dos más. Toca ser pacientes y esperar. Pronto estaremos seguros de dar el paso, el paso que nos lleve a la gloria.
