Y de repente... Millene (2-1)

El Depor Abanca se impuso por 2-1 al Espanyol con Millene como indiscutible protagonista. La delantera brasileña fue autora de un doblete y su segundo tanto llegó en el tercer minuto de descuento, dando a su equipo un triunfo heroico, de los que se recordarán durante mucho tiempo en caso de que se produzca el ansiado ascenso. Un objetivo, este último, que es más sencillo tras lo vivido esta mañana en Abegondo, ya que el conjunto coruñés recupera la primera plaza y deja a su rival a tres puntos.

La alineación titular de Irene Ferreras no presentó sorpresas en cuanto a las jugadoras de campo. En portería, Lucía Alba gozó de su tercera oportunidad consecutiva. Por su parte, el Espanyol presentó un esquema muy móvil, con tres centrales y las carrileras Caracas y Lucía Vallejo situadas en ocasiones en posiciones casi de extremo.

La primera mitad fue de lo más extraña. Tras unos primeros compases de tanteo, el juego estuvo detenido durante cinco minutos para atender a la espanyolista María Vaqueros, aquejada de un golpe en la ceja. En cuanto al fútbol, al Depor le llegó antes el gol que el juego, y cuando estaba mereciendo doblar su ventaja vio como se iba al descanso 1-1.

El equipo herculino tuvo la fortuna de que la árbitra no vio un claro penalti por mano de Samara a la salida de un córner. Reclamaron al unísono las jugadoras del Espanyol, pero la jugada terminó sin castigo. Más allá de eso, se llegó al ecuador del primer acto con poco que reseñar. Fue entonces cuando Millene penalizó un grave error de Núria. La central perica intentó ceder a su portera, pero lo hizo con tan poca fuerza que el balón le quedó franco a la delantera brasileña, que definió con una perfecta vaselina ante la apurada salida de Salvador. La dedicatoria del tanto, para la lesionada Ayaka.

El gol espoleó al Depor y la propia Millene mandó un balón al palo tras otro error en la entrega de la zaga visitante, en este caso de Estefanía. En el córner derivado de la acción, Salvador tuvo que intervenir ante un cabezazo de Samara y posteriormente un nuevo envío desde la esquina de Paula fue directo al travesaño.

No pudieron las blanquiazules irse en ventaja al entretiempo, pues encajaron justo antes de un largo descuento. Mar Torras, que ya había marcado en la primera vuelta, aprovechó un buen pase de María Vaqueros y batió a Lucía, que llegó a tocar el balón pero se venció algo antes de tiempo.

Segunda parte

El partido regresó de vestuarios con poco ritmo y algunas interrupciones del Espanyol, una declaración de intenciones de que no veían el punto como malo. Les habría mantenido en el liderato.

Intentó agitar el partido Irene Ferreras dando entrada a Lucía Rivas, que volvió a mostrar personalidad y a dejar buenas acciones. En torno al minuto 65 el Depor parecía apretar, con el clásico momento en el que adelanta líneas, roba rápido y Abegondo aprieta. No fue como en otras ocasiones, ya que el Espanyol se defendía con relativa comodidad y el equipo herculino no era capaz de generar ocasiones.

Parecía que el partido terminaría en empate, porque no había peligro en ninguna de las dos áreas, pero quedaba una última acción. Un último intento de una Ainhoa que había estado imprecisa durante todo el duelo, pero a la que el fútbol le tenía reservado un gran premio a su perseverancia. Se encontró con el balón en banda derecha, le ganó el duelo a su par y sacó un envío tenso que superó a la guardameta Salvador y que Millene, con fe, supo hacer bueno.

Explotaron de alegría todas las jugadoras, el banquillo y la grada. Sólo había que resistir un par de minutos más. En esos últimos compases fue expulsada Irene Ferreras por recriminarle a Caracas una acción sobre Lucía y el Depor supo mantener el balón alejado de su área.

La próxima estación, dentro de ocho días en el campo del AEM. Será otra historia. Hoy el deportivismo se dedicará a disfrutar de la victoria. Pasado el minuto noventa, como mejor sabe.