Apenas tres días después de la derrota en el Palacio de los Deportes de Riazor contra el Reus (1-2), el Deportivo Liceo viaja a Sant Hipòlit para medirse a un Voltregà (12.30 horas) que es un rival directo para la clasificación en la Copa del Rey.
El conjunto herculino viajará a tierras catalanas con las ganas de resarcirse de las dos derrotas consecutivas que acumula. Su peor racha desde la temporada 2020/21.
Con todo, hay que matizar que el equipo entrenado por Juan Copa lleva sin contar con la plantilla al completo desde el partido de la Supercopa, ya que poco después se lesionaría Bruno Saavedra, que será baja lo que queda de año, y las molestias físicas de Dava Torres.
Precisamente el capitán se perderá el partido de hoy debido a esos problemas. Hasta entonces, como dijo su entrenador Juan Copa “había estado jugando al 30% para echarnos una mano y ya se merece cuidarse y que vuelva cuando esté al 100% por nos hará mucha falta”.
Por estos dos motivos, el club que se reforzó con el argentino Guido Pellizzari, que debutó en la derrota contra el Reus, tras varias semanas sin poder jugar debido a problemas administrativos con su ficha. Para este duelo transcendental jugará.
Respecto al partido, Juan Copa indicó que “tenemos que ir a Voltregà a recuperar los tres puntos que perdimos en casa contra el Reus en el que no nos acompañó la puntería”.
Y es que en ese partido, a pesar de ejercer una mayor dominio que su rival, sólo fue capaz de superar la portería defendida por Càndid Ballart, gracias a una gran acción de César Carballeira.
Esa falta de puntería ocasionó la tercera derrota seguida del Liceo –dos de OK Liga (Barça y Reus) y una en Champions (Barça)– en un final de año que se prevé muy complicado. Tras viajar a Voltregà, el cuadro coruñés se medirá este sábado, en Riazor, contra el Alcoi (13.00 horas) y el jueves 14 de diciembre cerrará el año recibiendo en casa al poderoso Barcelos luso para disputar el segundo encuentro de la Fase de Grupos de esta edición de la Champions.
Pero antes de pensar en eso, el Liceo se tiene que centrar en Voltregà, un equipo que es un rival directo para clasificarse para la Copa del Rey, el gran objetivo que tiene el cuadro de Juan Copa en ese final de año.
Un feudo complicado
El equipo comandado es el actual séptimo clasificado con 14 puntos, teniendo sólo un punto menos que el Liceo y el Calafell (15) y dos menos que el Reus (17). Esto demuestra la enorme igualdad que hay en la parte de arriba de la OK Liga.
Además, los de Sant Hipòlit cuentan con la ventaja de jugar en su feudo, dónde esta temporada sólo ha perdido un partido y fue contra un Barça que no lo tuvo nada fácil (4-5). Completan el registro tres triunfos y un empate.
Esta racha positiva está lograda, aparte del gran talento que tiene el Voltregà, por el gran apoyo de su afición que convierte el Pabellón Municipal Oliveras de la Riva en un auténtica caldera que provoca que los sticks pesen más de lo que deberían.
Como se decía, el conjunto local tiene una gran plantilla pero hay dos jugadores que destacan por encima del resto: los exliceístas Àlex Rodríguez y Jordi Burgaya.
Ambos jugadores dejaron huella en A Coruña puesto que en la temporada 2021/22 lograron ser campeones de la OK Liga defendiendo la elástica verde. Sin embargo, el año siguiente Burgaya se marcharía mientras que Rodríguez se quedaría un año más, pero este verano decidiría ir a su casa.
En su retorno a Sant Hipòlit, ambos siguen demostrando su calidad y sostiene a su equipo con goles. Jordi Burgaya con 9 y Àlex Rodríguez con 6, son los máximo goleadores del Voltregà. Por lo tanto, será vital detenerlos para poder vencer.
