El RC Deportivo comienza ya a perfilar sus movimientos en el mercado de cara a fortalecer la plantilla para el curso venidero, de nuevo en Primera División.
Para la portería la Secretaría Técnica blanquiazul maneja los nombres de dos metas experimentados que sin embargo acaban de perder la categoría con sus respectivos equipos, Guillermo Ochoa con el Granada y Salvatore Sirigu con Osasuna.
La incertidumbre sobre el futuro profesional de Germán Lux -con una oferta de renovación encima de la mesa- hace más necesaria que nunca una adquisición para el arco coruñés.
El internacional mexicano Guillermo Ochoa, cuya actuación en el Mundial 2014 resultó inolvidable, no seguirá en las filas del Granada en Segunda División.
Aunque acaba de entrar en la historia para su desgracia como el portero más goleado en Primera División (80 dianas encajadas), ha sido de largo el mejor futbolista de la escuadra nazarí, a la que salvó en numerosas ocasiones de goleadas de auténtico bochorno.
No en vano, el 'Memo' ha sido también el guardameta con mayor número de intervenciones positivas de la Liga, y es que la más que endeble defensa del Granada lo 'sometió' a un bombardeo rival en cada partido de Liga.
El Deportivo tendrá que apurar las negociaciones por este futbolista, ya que numerosos clubes de élite pretenden también obtener sus servicios.
El Olympique de Marsella francés, el PSV Eindhoven holandés, el Cruz Azul mexicano e incluso el Sevilla se han interesado en este internacional azteca de 31 años.
El segundo nombre de portero que ha trascendido por su vinculación con el Deportivo ha sido el del italiano de Osasuna Salvatore Sirigu.
Fichado en el mercado de enero por el club navarro, se ha convertido en indiscutible en la escuadra pamplonica, pero en sus planes no entra actuar el próximo año en Segunda.
A sus 30 años regresará a la disciplina del PSG, conjunto que no cuenta con él para el próximo año y que podría negociar una cesión o una venta.
Sirigu disputó 19 encuentros desde su llegada a El Sadar, con un balance de 49 goles encajados y 111 paradas; al igual que en el caso de Ochoa, la debilidad defensiva de su escuadra le ha pasado una gran factura. Pese a todo ha sido de lo mejor de su club.