Lucía Paz Aldrey (15 de febrero de 1999, Santiago de Compostela) es Luchy, la capitana del Deportivo Liceo, un recién ascendido que no le tiene miedo a nadie en su regreso a la OK Liga, un equipo que se quedó sin entrenador tras la primera jornada por la dimisión de Carlos Loureiro, que se fue para visibilizar la falta de medios en el conjunto femenino. Dos semanas después, Luchy prefiere no mojarse y se centra en la pista: “Que cada uno que saque sus propias conclusiones”, lanza.
Una victoria contra el Bigues i Riells, una derrota en Manlleu y un empate contra el Telecable Gijón, ¿cómo valoras el comienzo de la temporada para un recién ascendido?
Nos hubiese gustado sacar los máximos puntos posibles, pero teniendo en cuenta el nivel que presentaban los tres primeros partidos, contra tres equipos que el año pasado estaban de mitad de tabla para arriba, con una plantilla prácticamente nueva y las dificultades que hemos tenido, creo que aprobamos con nota.
¿Qué sabor tiene el empate contra el Telecable Gijón después de mandar en el marcador la mayor parte del partido?
Sacar un empate contra el Gijón es súper importante, pero nosotras nos quedamos con la sensación que nos empataron y no de que empatamos nosotras. Viendo el desarrollo del partido, que nos pusimos 3-0 en los primeros minutos y también fuimos ganando 4-3 y 5-4, creo que nos lo pudimos haber llevado perfectamente.
¿Cuáles son las aspiraciones del Deportivo Liceo?
Aspiramos a ganarlo todo: Copa de la Reina, OK Liga, Copa de Europa... pero este es un proyecto a largo plazo y tenemos que ir paso a paso. A ver cómo nos vamos adaptando, pero esta temporada no sería raro luchar por la Copa y la liga. No tenemos miedo a ningún rival. Es más, ningún equipo puede decir que jugar contra el Liceo es un partido fácil.
¿Cómo es el proceso de adaptación con tantos cambios?
Es cierto que seguimos la mayoría de jugadoras del ascenso, pero tenemos a seis nuevas. A nivel de juego damos nuevas pinceladas cada semana y creo que nos hemos adaptado bastante bien, pero creo que acabaremos entendiéndonos a la perfección.
¿Cuál es tu papel como capitana en ese proceso?
Yo intento que todas nos llevemos lo mejor posible y que las nuevas se adapten lo más rápido posible. Y lo cierto es que somos un equipo bastante unido, todas tenemos una relación de amistad y eso se nota un montón en la pista.
¿Cómo os ha afectado la dimisión de Carlos Loureiro?
Es un cambio grande, pero le agradecemos a Carlos todo lo que ha hecho porque ha sido muy grande y su marcha nos da mucha pena. Noe (Uzal) y Marc (Godayol), que ya estaban en todos los entrenamientos con nosotras, han sabido adaptarse muy bien. Han seguido las pautas de Carlos, aunque también han hecho algunos cambios.
¿Se ha puesto la directiva en contacto contigo para tratar las diferencias entre el masculino y el femenino?
Hemos estado en contacto, sobre todo después de la dimisión de Carlos. Y trabajamos para que esto nos afecte de la menor manera posible.
¿Es posible la igualdad?
Creo que el nuestro es un equipo de corto plazo y entiendo que los chicos llevan mucho tiempo en la élite. Que cada uno saque sus propias conclusiones. No tengo más que decir sobre el tema.