La sección de baloncesto del F.C. Barcelona acaba de anunciar que tiene previsto para esta temporada un déficit de 27,4 millones de euros. ¡Madre mía¡. Es obvio que la competición está realmente adulterada en el aspecto económico. Visto el planteamiento, cualquier secretario técnico puede conformar un equipo en condiciones sin el más mínimo reparo, menudo chollo. Paga papa fútbol. Los demás compañeros de fatigas a callar, no vaya a ser que, los “dependientes”, se marchen a la liga europea, que lo están deseando. Es una referencia, imagino que el Real Madrid estará en la misma, o parecida, sintonía.
Cambio de dirección… Sin debate no hay pasión… Fundamento esencial del fútbol. Varias son las confluencias que circunstancialmente vive el deportivismo. La primera de ellas es que tras tocar días de gloria, en cuanto resultado se refiere, se entra en mini crisis psicológica. El equipo había conseguido volver a ilusionar y revolver el espíritu de la afición. Todos sabemos que el camino no va a ser fácil, pero ojo, se observa una falta de cambio de ritmo preocupante. Cuando todo se desenvuelve por el camino previsto, la rueda gira sin problema. Ahora bien, cuando surgen los problemas lógicos de la competición, la adversidad bloquea la intensidad. Es verdad que se está empezando, pero teniendo en cuenta los precedentes vividos, que a cuerpo técnico y jugadores no se les vaya la referencia de lo que se está jugando y de cómo deben afrontar cualquier envite.
Otro punto que está en la ruleta, es el de Noel. Me choca el proceder de actuación. Siempre se lee…. “hay que preservarlo”, “somos los primeros en saber lo que le conviene”, “debe ir poco a poco”, “sus compañeros veteranos le ayudan en el día a día”, “es una esponja recibiendo consejos”. Todo muy mediático. Sé que hablo desde la distancia, ni conozco al jugador, ni a su entorno. Pero la realidad es la que es: ¿Tiene condiciones?. Como podemos comprobar, su explosión deportiva está demostrada. Entonces… ¿por qué no juega más?. Y ya no digo que lo haga en el primer equipo, que también. Pero este chico tiene que participar, donde sea, pero ser activo del juego.
Borja Jiménez aduce que es jugador del primer equipo y que no se puede arriesgar a que se lesione. Demagogia. ¿Acaso cuando va convocado por la selección española no le puede suceder?. ¿O en cualquier entrenamiento?. Lo que no puede ser es que en 15 días, sólo dispute 10min de juego.
Hay cierta similitud con las ofertas de trabajo, se pide determinada experiencia y se forma un bucle. Si no trabaja, nunca tendrá experiencia. Si a Noel, el bueno de su entrenador, lo saca ahora para disputar 60, 70 o 90 minutos, se dirá que le falta ritmo y se volverá a repetir aquello de que hay que ir poco a poco.
Lo más importante de todo es que el chico sea feliz. Me gustaría saber lo que realmente piensa el futbolista. Sobre todo el no poder estar con sus “compañeros” en competición europea. Que ahora Noel sea clave para que el equipo ascienda, es duro de asimilar. Pero en esto del fútbol, cada maestrillo tiene su librillo.
Finalizo. Lo vengo diciendo desde hace tiempo. Hay que salir de la oficina y transmitir pasión. De eso el amigo Lendoiro sabe mucho y lo sigue trabajando en el día a día. Una vez a la semana el técnico transmite lo que puede o lo que le dejan, pero el presidente debería aportar algo de su parte a todo este entramado. Hay temas que están cogidos con alfileres sin punta.
Como siempre un placer.
