El fin de curso autonómico no deparó sorpresa alguna: Samertolameu, campeón de la Liga Galega, se adjudicó la XXXV Bandeira Teresa Herrera, que en su edición femenina tuvo como ganadora a Cabo da Cruz, que unas horas antes había conquistado la Liga en la regata final, disputada también aguas del Orzán.
La tripulación moañesa, que disputará el playoff de ascenso a la ACT, refrendó la superioridad exhibida en la jornada calificatoria del sábado, en la que fue la más rápida, además con gran autoridad: 15 segundos de ventaja respecto a la embarcación de Cabo da Cruz. Ayer se impuso por delante de Bueu, Cabo y el CDM Mera.
El lugar de Samertolameu lo ocupará la campeona de la segunda categoría, el CR Narón. Los otros movimientos entre competiciones se decidieron ayer en el Orzán, con la disputa de la segunda jornada del playoff, que generó un resultado ‘equitativo’: ascendió un equipo de la B, el CM Mugardos –segundo clasificado en la competición regular– y se mantuvo uno de la A, la AD Esteirana, que había finalizado la Liga en antepenúltima.
La trainera de Muros dominó la primera jornada, con 7 segundos y 46 centésimas de renta sobre la ferrolana. A casi 14 segundos quedó el CR Muros y a cerca de 35 el CR Cedeira. Ayer se impuso la embarcación mugardesa, que acabó primera del playoff, tras sumar los tiempos de las dos tandas, con algo menos de tres segundos de margen sobre Esteirana, que a su vez superó por algo más de 20 segundos a Muros. Cedeira volvió a ser el ‘farolillo rojo’, a más de un minuto de distancia de Mugardos.
Por último, Cabo da Cruz cerró cerró con la Teresa Herrera su gran temporada. Ayer se impuso por delante del CR Perillo, que también había sido segundo el sábado, superado por el CR Chapela, al que se adelantó ayer.
Punto final a una temporada que padeció algunos coletazos de la pandemia: confinamientos perimetrales que impdieron desplazar para competir a varios equipos.
