Ya queda menos para que el jueves arranque en Riazor la Copa del Rey. Es la última oportunidad que tendrá el Liceo de ganar un título en la temporada 2020/2021, tras haber agotado sus otras opciones (la europea, la Liga y la Supercopa). Los verdiblancos contarán con el factor cancha a favor (después de que el año pasado no pudiera ser a causa de la pandemia). Pero la historia reciente de este trofeo, que han levantado en nueve ocasiones, no trae buenos recuerdos a los coruñeses.

Para empezar, no lo ganan desde aquella victoria sobre el Igualada en Jerez en 2004. Diecisiete años en los que el Liceo siempre ha partido entre los favoritos, pero nunca ha sumado ese deseado décimo entorchado. Incluida la edición que tuvo lugar en el Palacio de Riazor, en 2009. Pero entonces, Marc Torra y el Vic se encargaron de amargar el día a los verdiblancos, apeándoles en semifinales.

Ya en la historia más reciente, el Liceo ha podido superar ese duelo de semifinales que tantas veces se le resistió y ha disputado las dos últimas finales. Pero en ambas ocasiones, en 2018 y 2019, el Barcelona se llevó el título.

El cuadro azulgrana, que en la presente temporada ha ganado tanto la Liga como la Supercopa, vuelve a ser el favorito para hacerse con el trofeo y sellar el triplete a nivel nacional. Algo que, el Liceo, entre otros, intentará evitar.

Y aunque no se vería las caras con el Barça hasta la final, los herculinos tienen clara esa premisa que tanto le gusta a su entrenador, Juan Copa, de ir partido a partido. Y el primer compromiso será el choque de cuartos, el jueves a las 20.45 horas, frente al Voltregá. Equipo que, por cierto, anunció ayer la renovación de uno de sus jugadores más importantes, Eric Vargas.