Luis Cendán, secretario del Bergantiños
¿Cómo celebró el ascenso el pasado domingo?
Había pensando en abrazarme al cuerpo técnico, pero me pasó algo que nunca me había sucedido. Empecé a llorar en la sala de la megafonía y no era capaz de hacer nada más.
¿Cuántos hijos tiene en la plantilla del Bergantiños?
Muchos, y no solo en esta plantilla. Le tengo mucho cariño a los chavales y, a veces, cuando tengo que dar bajas, lo paso realmente mal porque soy de lágrima fácil.
Hablaba de las bajas. ¿Se ha llevado alguna decepción?
Las noches previas a dar la baja a algún jugador no duermo. Pienso cómo se lo puedo decir pero, prefiero que se enteren por mí antes que por el resto del mundo. Hay un futbolista del que me acuerdo todos los años porque vino a Preferente y nos dio un plus: Roberto Piñeiro
¿Seguirá a pie de campo?
No voy a estar más entre los banquillos porque se pueden interpretar cosas que no son.
¿Cuál fue la felicitación que más le llamó la atención?
La de Bugy me llegó mucho. Fue muy especial.