Primer match ball perdido
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17º-23º

Primer match ball perdido

Primer match ball perdido
Yelco Alfaya (d), extremo del Bergantiños, ante Yahvé, tuvo las mejores ocasiones de su equipo | raúl lópez

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Por tercera vez –en cuatro jornadas– en la fase de ascenso, el Bergantiños se encuentra con un 2-0 en contra. Sucedió también contra el Alondras en As Eiroas la primera jornada, ocurrió lo mismo ante el Arosa en la segunda (la diferencia llegó a ser de 3-0) y volvió a pasar ayer en O Morrazo. El equipo de José Luis Lemos desaprovechó el primera opción de conseguir el ascenso. Los goles de Luismi y Samu Vilariño fueron suficientes para el Alondras. El Bergan recortó distancias en el 86 con un gol en propia meta de Martín Pastoriza y soñó con una remontada que, en esta ocasión, no llegó.


La primera incógnita en el Bergantiños era la del lateral derecho. Ante la sanción de Diego Vela, Lemos no apostó por ninguno de los dos futbolistas que ocuparon esa posición a lo largo de la temporada –el canterano Diego Rodríguez o el central/lateral izquierdo Marcos Rodríguez– sino que el elegido fue el central Iago López, al que, como era de esperar, no se le vio cómodo.


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En la primera mitad hubo poca chicha, un golazo y dos buenas ocasiones del Bergantiños. El golazo lo marcó Luismi. Fue en el minuto 34, cuando el lateral izquierdo Pablo García sacó un centro a media altura buscando el primer palo. El ‘7’ del Alondras se anticipó a Pablo Agulló y definió con el exterior de su bota derecha enviando el cuero pegado al segundo palo, lejos del alcance de Santi Canedo. Las dos mejores opciones del Bergan fue de Yelco: primero en una acción de estrategia ejecutada por Remeseiro con remate alto cuando ya estaba con poco ángulo y después también desde dentro del área, escorado en el perfil izquierdo, y con un tiro raso buscando el segundo palo que un defensa desvió a córner.


Descanso

Lemos hizo un doble cambio en el descanso. Se quedaron en la caseta dos de los tres mediocentros que empezaron el partido –Abel y Uzal, uno de los destacados del primer acto– y entraron Concheiro y Duque. El Bergan pasó a jugar con dos puntas –Cano y el propio Duque– con Yelco en la mediapunta y sin extremo izquierdo. El juego del conjunto carballés fue mucho más directo a pesar de contar con dos jugadores de buen pie en la medular como Marcos Remeseiro y Antón Concheiro.


En el 63, el partido se puso mucho más cuesta arriba aún para el Bergantiños en una de las pocas circulaciones en campo propio de la segunda mitad. Iago López dio un pase dentro para Cano, superado por un Brais que anticipó limpiamente y dejó la pelota para Adrián Cacheda. El joven mediocentro del Alondras orientó el balón hacia delante y metió un buen pase interior para Samu Vilariño, que ganó la posición a Marcos por dentro y definió raso (2-0) ante la salida de Santi Canedo.


Un minuto después de encajar el 2-0, el Bergantiños volvió a tener una ocasión clamorosa para superar a Martín Pastoriza. Lamelas controló pegado a la banda derecha, apartó el balón hacia dentro y puso un centro perfecto que cayó en el punto de penalti, donde Cano controló con el empeine. El esférico le quedó franco a Yelco, que estaba totalmente solo en el segundo palo. Golpeó demasiado fuerte sin dejar caer el todo el balón y su disparo salió por encima de la portería local. Era la tercera clara del ’11’ visitante.


Acto seguido, Lemos volvió a dar un nuevo paso al frente y lo hizo retirando a un defensa –Aarón– para dar entrada a otro delantero más –Álex Tarí–. El Bergan se quedó con tres centrales –Iago, Agulló y Marcos–, con un doble pivote formado por Concheiro y Remeseiro, con Lamelas en la derecha, Yelco y Duque alternando en la izquierda y con uno de estos dos, Cano y Tarí como futbolistas más avanzados. Lejos de encontrar más situaciones de gol, acumular más jugadores de ataque hizo que el Bergantiños perdiese control del juego. Todos los balones eran directos desde los defensas o desde el portero buscando que Tarí o Cano peinasen y que Duque corriese, pero el Alondras se encontró cómodo defendiendo ese tipo de envíos frontales.


Emoción

Nunca se debe dar muerto por Bergantiños y así fue. En el 86, en uno de esos lanzamientos directos, Aitor Díaz midió mal y cabeceó hacia su área. Cano aprovechó esa concesión para rematar de vaselina ante un Martín Pastoriza que no estaba bien colocado. La bola dio en el larguero y de ahí al portero, que metió el balón en su portería. Un minuto después del 2-1, Agulló tuvo el empate en un centro desde la derecha de Lamelas. El cabezazo del capitán del Bergan se fue muy cerca del marco de Martín. No tuvo más el conjunto carballés, que incluso pudo recibir el 3-1 en una contra de Mauro.


El equipo de Lemos tendrá que volver a intentarlo el próximo domingo ante el Arosa.

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