El comunicado de Lendoiro y la respuesta del presidente del Depor en el programa de De La Morena escenifica que asistimos a los primeros cañonazos de la batalla.
Los dos entienden que les asiste la razón y los dos defenderán sus posturas hasta el final. Dicen que Augusto no se callará y prepara una nueva carga para los próximos días. Dicen que Tino está más tranquilo que un torero fuera del ruedo y que además está motivado para responder cuantas veces sea menester.
El mundo no es normal, en general. El fútbol tampoco, y dentro del fútbol, nuestro Deportivo es un club absolutamente distinto al resto por muchos factores que no hace falta enumerar. Si acaso el último, el expresidente y el presidente respondiéndose y argumentando nuevas posiciones, antagonistas, uno vía comunicado otro vía programa de primer nivel nacional.
Dentro de 25 años el Depor debería seguir existiendo, compitiendo en la mejor Liga, con un pasado si cabe más glorioso, con un futuro esperanzador, con nuevos d deportivistas, con un camino andado y por andar.
No sé dónde estaremos dentro de 25 años, pero lo que sí sé, es que lo que realmente importa es el Deportivo, no las personas. Las gentes pasan, con mejor o peor recuerdo, las obras son las que permanencen. Por encima de todo está el RC Deportivo y hay que preguntarse si una nueva batalla beneficia o no a lo más importante. Al escudo.
