Siempre me llamó la atención que el club decano del fútbol modesto coruñés tuviera por nombre SD Sin Querer. Ignoro cuál es su origen pero bien se podía aplicar a lo acontecido en el cuadro deportivista en las últimas jornadas. Una inesperada derrota del Cádiz en casa y un parco empate de los coruñeses en Elche colocan –casi sin querer- al cuadro dirigido por José Luis Martí en zona de promoción a falta de una jornada. Resuelto ya el descenso y los puestos de ascenso directo queda por dirimir el equipo que acompañará al Málaga, Albacete y Mallorca en la pelea por la última plaza que da acceso a la Primera División. Depor (65), Cádiz (64) y Oviedo (63) optan a completar las eliminatorias de ascenso.
La última jornada tiene un calendario que, en teoría, no esconde grandes sorpresas. El RCD recibe en Riazor al descendido Córdoba que ha sido el peor visitante a domicilio logrando una sola victoria y tres empates.
El Cádiz visita el Molinón donde los gijoneses no querrán facilitarle las cosas al Oviedo, vecino y rival atávico. Por su parte los ovetenses acudirán al campo del campeón, Osasuna, que tratará de festejar su ascenso ante su afición. Sobre el papel son los deportivistas quienes tienen todo en su mano para meterse en la ‘pole’ de la promoción si bien a lo largo de la temporada nos han acostumbrado a no dar nada por hecho. Si el equipo está fino y con empuje, la afición pondrá el resto para conseguir el triunfo.
Cuestión distinta serán las eliminatorias posteriores. En estos casos suele ocurrir que los clubes que llegan al final de temporada con inercias más positivas son quienes acaban llevándose el gato al agua. Pues bien, de los cuatro equipos que se disputarían la plaza de ascenso el Málaga y el Mallorca vienen con la moral muy subida por sus últimos resultados mientras que el Depor llega renqueante y sin mucha solvencia para resolver partidos.
Creamos en que los nuestros accedan a la ronda final y tengan un comportamiento eficaz en las eliminatorias. La diferencia de estar en una u otra categoría significa mucho dinero, mucho prestigio y vislumbrar un futuro más esperanzador. En cualquier caso los nuevos gestores del RCD deberán estar atentos y, sobre todo, muy rápidos a la hora de confeccionar la plantilla del año que viene sabiendo que el presupuesto que manejarían en cada uno de estos dos escenarios compromete la planificación.
@pgarcia_ramos