Aunque solo Mercedes conoce la victoria en el circuito de Sochi, incorporado al calendario en 2014, Ferrari y Red Bull plasmaron ayer su firme intención de obstaculizar el reinado de las ‘flechas plateadas’ en la sexta edición del Gran Premio de Rusia.
Charles Leclerc y eMax Verstappen, llamados a competir por el título en años venideros, pusieron sus nombres al frente de la clasificación en los Libres 1 y 2 respectivamente. Anunciaron, de este modo, que tanto Ferrari como Red Bull están a la expectativa, por si Mercedes flaquea.
Su situación actual no es tan imponente pese a liderar cómodamente la clasificación de pilotos y de constructores. En ninguno de los tres Grandes Premios más recientes, Bélgica, Italia y Singapur, la victoria ha caído en manos de Lewis Hamilton o de Valtteri Bottas.
El circuito de Sochi, con sus 5.848 metros y multitud de curvas de 90 grados, se presentaba como un terreno propicio para el líder del Mundial y su compañero, aunque en la primera jornada Ferrari y Red Bull se rebelaron contra su jerarquía. Leclerc se puso al mando por la mañana (1:34.148) y Verstappen aceleró para comandar la tabla por la tarde (1:33.162), cuando Mercedes descubrió una brecha de casi ocho décimas a recortar por Hamilton.
Hoy, con pronóstico de lluvia, se espera una reacción del inglés en la calificación, donde Bottas será asimismo candidato a la pole.
Zona media animada
La zona media también está animada. Toro Rosso, Racing Point y Renault experimentaron mejores sensaciones que McLaren. Lando Norris y Carlos Sainz ha empezado por detrás de sus rivales.
Notoria es la presencia de Sergio Pérez en la séptima posición. Su compañero de equipo, Lance Stroll, fue noveno en los Libres 2, lo que certifica la mejoría de la escudería a falta de que el Gran Premio siga hoy y mañana, en un circuito poco atractivo para los pilotos. De hecho, San Petersburgo se postula para relevar a Sochi en un futuro próximo.