El alemán Pascal Ackermann (Bora) ganó la segunda etapa del Giro de Italia, entre Bolonia a Fucecchio, de 205 kilómetros, en la que el esloveno Primoz Roglic (Jumbo) mantuvo la maglia rosa.
Ackermann se impuso al sprint con un tiempo de 4 horas, 44 minutos y 43 segundos, en una etapa ondulada y marcada por la lluvia en la parte inicial, por delante del italiano Elia Viviani (Deceuninck) y del australiano Caleb Ewan (Lotto).
Roglic estuvo en el grupo y defendió su primera posición en la clasificación general, con 19 segundos de ventaja sobre el británico Simon Yates (Mitchelton) y 23 sobre el italiano Vincenzo Nibali (Bahrein).
No faltó la habitual escapada, con ocho corredores que se hicieron con una ventaja máxima de cuatro minutos sobre el pelotón y que la defendieron hasta los últimos 50 kilómetros, cuando los favoritos aumentaron el ritmo.
Nibali se colocó al frente del grupo junto a sus compañeros del Bahrain para controlar y conseguir una posición ventajosa de cara al final de la etapa. Poco a poco, la fuga perdió integrantes y solo se quedó con cuatro, los italianos Giulio Ciccone (Trek), Marco Frapporti (Androni), el polaco Lukas Owsian (CCC) y Francois Birard (AG2R). Aguantaron hasta los últimos 20 kilómetros, pero el pelotón iba acercándose.
La aventura murió a 8.000 metros de meta. El Bora tomó el mando del grupo. El sprint se lanzó a 300 metros del final y Ackermann atacó primero, perseguido por Gaviria y Viviani. El alemán empujó fuerte y el italiano, que se pegó a la rueda del colombiano, no tuvo opción de alcanzarle. El colombiano no tuvo energías y fue superado a pocos metros de la raya por Viviani y Ewan.
Hoy se disputa la tercera etapa, entre Vinci y Orbetello, con un recorrido de 220 kilómetros y una ‘tachuela’ de Cuarta categoría a 28 kilómetros de la llegada.