El prestigio deportivo de alcanzar los dieciseisavos de final de la Liga Europa y hasta un posible premio económico de algo más de 2 millones de euros están en juego para el Getafe, que disputará una ‘final’ ante el Krasnodar.
Los hombres de José Bordalás se enfrentan a un reto muy jugoso y un empate es suficiente para conseguir su billete para la siguiente fase de la Liga Europa. Es lo mínimo que necesita para seguir adelante en una competición en la que, de momento, ha cumplido.
Con tres victorias, dos ante el Trabzonspor turco y otra frente al mismo Krasnodar en Rusia, suma nueve puntos, los mismos que su rival hoy y uno menos que el Basilea, contra el que perdió sus dos enfrentamientos.
Esos números, más los que la UEFA asignó al club antes de empezar la temporada, han dejado en las arcas del Getafe un total de 11,85 millones en conceptos como los puntos conseguidos, el “market pool”, el coeficiente UEFA o los ingresos por participar en el torneo.
Ahora, en noventa minutos, se jugará como máximo otros 2,07 millones de euros: 500.000 por pasar de ronda, 570.000 o 190.000 por conseguir una victoria o un empate, respectivamente, y otros 500.000 o un millón dependiendo si acaba en la segunda o en la primera posición del grupo C.
Esa inyección económica, que podría crecer en el caso de continuar con más éxitos, siempre viene bien a un club humilde como el Getafe, que también tiene el objetivo de conseguir un impulso deportivo clasificándose por segunda vez en su historia para la siguiente fase.
Lo logró en la temporada 2007/2008, mientras que en la 2010/11 no pasó de la fase de grupos. Ahora, quiere reeditar ese éxito de hace más de una década en un partido a vida a muerte en el que José Bordalás confiará en sus hombres más habituales.
Hará pocos cambios en un grupo que sólo tendrá las ausencias obligadas de sus dos únicos lesionados, Markel Bergara y el portero serbio Filip Majnolovic. El resto de la plantilla, salvo los no inscritos en la competición (Xabi Etxeita, Amath Ndiaye y Vitorino Antunes) está disponible para el técnico, que tendrá que hacer muchos descartes por motivos técnicos.
Por su parte, el Krasnosdar no podrá contar con su máximo goleador en todas las competiciones. El brasileño nacionalizado ruso Ari, tendrá que cumplir un partido de sanción por acumulación de tarjetas y el sueco Marcus Berg se perfila como su relevo.
