El CD Lugo confirmó en la jornada de ayer la destitución de su entrenador, Eloy Jiménez, que se hizo cargo de la plantilla en la recta final de la temporada pasada.

En un comunicado, el club rojiblanco explica que el Consejo de Administración ha tomado la decisión de despedir al técnico “una vez analizada la trayectoria deportiva de la primera vuelta”.

El objetivo del cambio, sostiene el Lugo, es “reconducir la situación actual” del equipo, que tiene un punto de renta sobre el descenso.

El club agradece a Eloy Jiménez “su trabajo y dedicación, y le desea todo tipo de éxitos personales y profesionales en su futuro”.

Desde que Tino Saqués compró el club en 2015, han entrenado al equipo Luis Milla, José Durán, Luis César Sampedro, Francisco Rodríguez, Alberto Monteagudo, Javi López y Eloy Jiménez.

Este último asumió el banquillo en los últimos partidos de la pasada temporada y, tras haber logrado la permanencia, es el único que ha continuado el siguiente curso en el conjunto lucense con Saqués como presidente.

El Lugo ha firmado su peor primera vuelta desde el último ascenso, el que logró en 2012, y es decimoctavo gracias al punto que sumó a última hora ante el Málaga, lo que le permitió afrontar el parón navideño fuera del descenso.

Lo curioso es que, aunque la escuadra rojiblanca no está instalada en los cuatro últimos puestos de la clasificación y aventaja a la zona de descenso en un punto, la directiva ha decidido destituir al técnico Eloy Jiménez. Y eso que en el último encuentro antes del parón de Navidad, la escuadra rojiblanca empató en un campo difícil como La Rosaleda, frente al Málaga (1-1).

Tras las vacaciones, al Lugo le espera un primer mes de 2020 bastante duro, ya que estrenará la segunda vuelta del campeonato liguero el 4 de enero en el Anxo Carro contra el Almería, que es el segundo clasificado de la competición con 36 puntos.

El siguiente compromiso de los rojiblancos será ante el Rayo Vallecano en el estadio madrileño. Un conjunto rayista que solo aventaja a los lucenses en tres puntos.

Tres días más tarde, el Lugo recibirá al Albacete, equipo que tampoco ha cumplido con los objetivos previstos y que ha cerrado la primera vuelta a seis puntos del descenso.

Los gallegos despedirán el mes de enero el sábado 25 en el campo del Huesca, un serio candidato al ascenso.