El pasado domingo ganasteis 2-3 al Friol, el único equipo que os había quitado puntos. ¿Ya os sacasteis esa espina?
La espina se saca pero no se olvida. Sabíamos que era un equipo difícil y que tenía muy trabajado el partido, como nosotras, pero teníamos claro qué hacer para ganar.
¿Qué os pidió Manu Sánchez antes del partido?
Simplemente nos dijo que teníamos que hacer lo que habíamos hecho hasta ahora. Salir a morder y confiar en nosotras porque ahora somos líderes y todos los equipos nos quieren ganar.
Y luego os tocó sufrir.
Sabíamos que iba a ser muy difícil y que iba a haber momentos duros en los que habría que mantener la cabeza fría pero estábamos más que preparadas para sufrir.
Siempre fastidia que me marquen y más que me vuelva a meter dos el mismo equipo
El Friol os ha marcado cuatro goles entre los dos partidos de liga, una cifra alta para el Depor. ¿Te fastidia?
Obviamente siempre fastidia que me marquen y más que me vuelva a meter otros dos goles el mismo equipo. Pero son gajes del oficio. Unos equipos consiguen marcarnos pero otros, por suerte, no.
Las dos últimas victorias ante Oviedo y Friol son de las que marcan un ascenso. ¿Qué suponen para vosotras?
Es una inyección de moral pero hay que tener siempre los pies en el suelo porque no dejan de ser seis puntos como otros. La liga es muy larga, queda toda la segunda vuelta, y cualquiera puede quitarnos puntos.
Casi no jugaste con el primer equipo en la pasada campaña, ¿pero consideras que ha cambiado mucho el Depor respecto al pasado curso?
El año pasado no jugaba con el primer equipo pero ya había esa buena relación con el filial. Es cierto que este año ha habido bastantes cambios. Bajas y fichajes que han subido un pelín el nivel.
¿Tú notas la presión que existe por ascender?
La presión siempre está ahí pero tanto para mí como portera como para las demás jugadoras porque si no marcan tampoco ascendemos. Es cierto que el puesto de portera tiene un handicap más, que es mantener la portería a cero.
Lo estás jugando casi todo. ¿Lo esperabas después de un primer año en el Depor B?
Sinceramente no me lo esperaba para nada. No te voy a mentir. Ha sido una sorpresa aunque no he dejado de trabajar para lograrlo porque en el Depor no se regala nada. Yo intento devolver en el campo la confianza que el cuerpo técnico ha depositado en mí.
En pretemporada tenías por delante a porteras con más experiencia que tú y poco a poco te has convertido en la guardameta titular del Depor. ¿Cómo has vivido todo ese proceso?
No me lo esperaba porque tenía una competencia difícil con Malena, una campeona de Europa, y Anita, que ya tenía experiencia en Segunda y no dejaba de trabajar. Pero la clave ha sido trabajar y saber sufrir.
¿Se puede contar alguno de esos momentos difíciles?
Cuando volvió Malena al equipo –se unió más tarde a la pretemporada tras proclamarse campeona de Europa sub-19 con España– lo hizo en buena forma y ya me dije: ‘o aprieto o me quedo fuera’. Como dice Manu: las oportunidades hay que aprovecharlas porque quizá solo pasen una vez. Y las oportunidades que me ha dado las he intentado agarrar.
Hasta los 17 años eras jugadora de campo y ahora eres la portera titular del máximo aspirante al ascenso a la Liga Iberdrola. ¿Cómo se explica eso?
Se explica por culpa del Villarreal. Mis referentes siempre fueron jugadoras de campo como Gemma Gil, que es de mi ciudad y ahora está en el Barça. Ahora, que ya juego como portera más de verdad, sigo queriendo aprender cada día. No me deja de sorprender Álex, el entrenador de porteros. Pero a día de hoy me sigo fijando en jugadoras de campo.
A veces echo de menos ser jugadora; ¿a quién no le gusta marcar un gol en el 90?
¿Echas de menos ser jugadora de campo?
Hay momentos que sí. ¿A quién no le gusta marcar un gol en el 90? Pero ahora como portera me propongo parar un penalti en el 90.
¿Y en los entrenamientos te pones de jugadora o tienes algún pique sano con alguna compañera?
Soy la típica que cuando vamos a empezar a entrenar siempre se pone a tirar caños, dar toques o intentar picar a Malena. Y al final del entrenamiento también intento picar a Peke y a las que les gusta marcar. Pero me da igual picarlas como jugadora que como portera.
¿Este año compartes piso con alguna compañera del Depor?
Sí, con Patri Díaz.
¿Y hay alguna anécdota que se pueda contar?
Por ejemplo que a ella le gusta mucho comer y a mí, cocinar. Somos el matrimonio perfecto.
¿Qué es lo que más te gusta hacer en Coruña?
Mi sitio favorito en Coruña es la Torre de Hércules. Voy a la Torre cuando quiero desconectar.
¿Qué le pides al 2019?
Le pido que se cumpla nuestro ascenso y que no haya lesiones. A nivel individual le pido poder ayudar en el campo y voy a seguir trabajando para ello.