El entrenador de la Unión Deportiva Las Palmas, Pepe Mel, reconoció ayer que ha tratado de “cambiar todo” en una semana de trabajo tras su llegada el pasado martes, y principalmente el “ritmo de juego” de cara al partido de esta tarde en Riazor ante el Deportivo.
El nuevo técnico considera que el ritmo que utilizaba el conjunto amarillo “no daba” para el objetivo de pelear por el ascenso, y por eso ha incidido en ello con unos jugadores a los que cree que les ha llegado su mensaje positivo.
“Hemos trabajado aspectos tácticos importantes, hemos cambiado todo: la estrategia a balón parado, defender de una forma que podemos estar más cómodos, la metodología, los automatismos... han sido cinco días que han dado para mucho”, explicó en rueda de prensa antes de viajar a tierras coruñesas.
Mayor velocidad
Ese cambio de ritmo al que se refirió implica que el equipo “transite a una velocidad mayor”, y requiere de una buena preparación física, por lo que necesitará a los 24 futbolistas de la plantilla para tratar de alcanzar al menos “la sexta plaza” de la competición.
Mel esperaba encontrarse a un vestuario “resignado, con la cabeza agachada”, pero se ha encontrado a un grupo “bueno de manejar” a pesar de ser “muy veterano”, y subrayó que ningún jugador se ha bajado del carro.
Para el preparador madrileño, sustituto de Paco Herrera, el partido de esta tarde en A Coruña es “importante” y llega en un “momento crucial”, en el que tratarán de no dejar pensar al equipo gallego para que se sienta “incómodo” sobre el terreno de juego.
Del conjunto albiazul, precisamente el último al que entrenó, dijo que tiene dos principales virtudes: la estrategia a balón parado, “que le ha dado muchos puntos”, y su transición, porque “se conecta rápido” al perder la pelota, algo “vital en cualquier categoría del fútbol mundial”.
La aspiración de Pepe Mel es que los aficionados de la Unión Deportiva vean que “algo está cambiando” incluso si no se consigue un buen resultado, porque un partido tiene “mil variantes que no se pueden controlar”.
El madrileño no quiso revelar quién sustituirá al sancionado Juan Cala en el centro de la retaguardia, ni tampoco si optará por dos delanteros de inicio como ha estado ensayando durante su primera semana al frente del equipo insular.
