Con ficha del filial, hace dos años dejó una prometedora carrera en el ‘kick-boxing’ y la esgrima cuando recibió la llamada del club coruñés. La pasada campaña dio un paso atrás para jugar cedida en el Friol y este curso vuelve a vestir de blanquiazul.

Primer partido en el once inicial del primer equipo, ¿te lo esperabas?
No me esperaba ser titular. Lo que yo hago es trabajar al 100% en cada entrenamiento para lograrlo. Esta oportunidad no sería posible sin el apoyo de todas mis compañeras y gracias a la confianza del cuerpo técnico.

¿Cómo te has encontrado?
Me encontré bien, pero necesito coger el ritmo, sensaciones y minutos. Intenté hacerlo lo mejor posible y dar el máximo para ayudar al equipo.

¿Es tan grande el salto de categoría Gallega a Nacional?
La Segunda División nacional es una categoría que te exige mucho más físicamente y, aunque seamos dos, tres o cuatro equipos los que estamos arriba, cualquiera te puede ganar o complicar el partido.

No me esperaba ser titular, trabajo al 100% cada entrenamiento para lograrlo

El Depor suma ya diez victorias seguidas, parece fácil.
Puede parecer fácil, pero nosotras trabajamos muy duro, nos esforzamos al máximo e intentamos hacerlo siempre lo mejor que sabemos. Creo que las mejores jugadoras están en el Depor, pero no solo basta con tener buenas jugadoras, hay que entrenar siempre al 100% y tener un vestuario unido. El nuestro lo está y eso nos ayuda a superar los partidos que se ponen más difíciles.

¿Qué ha cambiado desde tu primera etapa en el Depor, la temporada 2016/17?
Personalmente ahora vivo en A Coruña y estudio el primer curso de Fisioterapia. A nivel futbolístico, la del Depor es una plantilla mucho más competitiva, ha dado un salto de calidad y es más difícil entrar en las convocatorias.

¿Por qué decidiste jugar una temporada cedida en el Friol?
Quería acabar Segundo de Bachillerato en el instituto de siempre y estaba más cerca de casa para ir a los entrenamientos. En el Friol me trataron súper bien: el presidente (Geluco) y las jugadoras me apoyaron desde el primer momento y me hicieron sentir como en casa. Creo que fue una decisión acertada.

Alba Suárez, Carlota Sánchez y tú sois las únicas tres jugadoras del filial que han jugado con el primer equipo, ¿tan díficil es el salto?
Es bastante complicado subir del B al primer equipo, pero yo lo he conseguido gracias a mis compañeras, tanto de las del filial como las del primer equipo y gracias a la confianza que el cuerpo técnico pone en mí.

Todas las jugadoras del B tienen la calidad para jugar en Segunda

Líder de Primera Gallega, ¿es ascender el objetivo del B?
El Depor merece tener a su primer equipo en LaLiga Iberdrola y al filial en Primera B, pero tenemos que ir poco a poco. Creo que en el B tenemos equipo suficiente para ascender. Ha mejorado muchísimo y todas las jugadoras que forman la plantilla tienen la calidad suficiente para jugar en cualquier equipo de Segunda. Pese a ser todas muy jóvenes, parece que tenemos mucha experiencia.

Solo dos jornadas para el primer duelo Depor-Oviedo de la temporada, ¿es muy difícil no pensar en ello?
Los partidos contra el Oviedo son nuestro gran objetivo, pero de nada vale ganar si luego empatamos o perdemos contra un rival cuaqluiera. Tenemos que pensar partido a partido.

¿Te ves jugando contra el Oviedo?
No pienso en eso, solo en disfrutar de cada entrenamiento, dar el máximo y ayudar al equipo. Si el cuerpo técnico considera que yo debo jugar ese partido, lo haré con la misma ilusión de un niño en su primer partido de liga.