Jesús Ángel García Bragado, de 49 años, el ‘abuelo’ de la selección española que competirá, del 27 de septiembre al 6 de octubre, en los Mundiales de Doha (Qatar), afronta sus decimoterceros campeonatos del mundo como “una oportunidad de llegar a los Juegos Olímpicos de Tokio 2020”, en los que pondría fin a su larga carrera deportiva.
Veintiséis años después de su primera experiencia mundialista, cuando se proclamó campeón en Stuttgart’93, el marchador madrileño se propone utilizar su decimotercera comparecencia el torneo universal como trampolín hacia unos nuevos Juegos Olímpicos, que para él serían los octavos. En Río 2016 ya batió el récord histórico de participaciones de un atleta.
“Este campeonato lo afronto como oportunidad para ir a Tokio, que es donde he decidido poner fin a mi carrera deportiva. Cuando terminé en Río 2016 no tenía tan claro dejar de competir, pero ahora sí: me gustaría llegar a Tokio para hacer allí mi última competición de 50 kilómetros y me imagino que mi última prueba a todos los niveles”, declaró.
Cerca de los 50
“No acudo a Qatar pensando en que llevo trece Mundiales sino en que tengo una oportunidad de ir a los Juegos Olímpicos y llegar al final de este largo viaje que ha sido mi carrera deportiva”. Cumplirá los 50 diecinueve días después de competir en Doha.
García Bragado llegó el domingo a Doha en el primer contingente del equipo español y de inmediato se puso a trabajar. “Salimos por la noche a entrenar y la verdad es que hace calor, pero habiendo estado aquí en agosto, parece que un poquito menos. De todas formas, las condiciones van a ser duras porque nunca se había competido ni de noche ni con tanto calor. Por mucho que afloje esta semana, la temperatura va a ser bastante alta. Habrá que ser prudente y ver con qué ánimo salen los más arriesgados”, subraya.
El madrileño recordó que “es una prueba que va a durar cerca de cuatro horas, por las condiciones en que vamos a competir. Todos nos hemos preparado lo mejor posible, con muchas concentraciones y mucha previsión”.
García Bragado se muestra, en principio, optimista: “Las expectativas personales de todos los que venimos aquí son buenas, aunque luego hay que encontrarse bien el día D a la hora H. Habrá que ver cómo se van dando las circunstancias porque igual de aquí a una semana cambia el tiempo”. La prueba de 50 kms se disputará el sábado 28 de septiembre.