Una de las curiosidades de la décimo cuarta edición del trofeo que organizan las Escuelas Luis Calvo fue que, durante el tercer y cuarto puesto y la final, los jugadores del Real Oviedo y los del Sporting de Gijón, en teoría máximos rivales en la comunidad asturiana, presenciaron los encuentros juntos en la grada de As Eiroas intercambiando opiniones e incluso aperitivos.
Una de las presencias más destacadas en los últimos encuentros del torneo y en la entrega de trofeos fue la del lateral carballés Miguel Loureiro, futbolista del Córdoba de Segunda y que no quiso perderse uno de los grandes eventos deportivos de fútbol base en la provincia coruñesa. La única pega, que las condiciones meteorológicas no acompañaron como en otras ocasiones.