Ahora mismo entrenador en categorías inferiores en el Sporting de Gijón, Pablo Álvarez recapitula acerca de una carrera futbolística profesional marcada por su paso por el club asturiano (2000-06) y por el RC Deportivo (2006-12).

Precisamente las dos escuadras que se verán las caras el próximo sábado en el estadio de Riazor (21.00 horas), en un duelo marcado por la necesidad, más imperiosa si cabe en el bando herculino.

Incapaz de efectuar un pronóstico para este envite con aroma de derbi norteño, augura una contienda presidida por la igualdad, en la que el club que sepa controlar sus emociones tendrá mucho ganado.

¿Qué tal te va la vida como técnico de categorías inferiores del Sporting?

Estoy muy contento, este año en el Cadete y esporádicamente colaboro con la Liga en proyectos internacionales como técnico, a veces haciendo ‘scouting’ y otras veces entrenando.

¿Te ilusiona el lado más formativo del fútbol?

Sí, estoy preparándome para el futuro, intentando aprender al máximo. Cuando dejas de jugar tienes que mirar a otros horizontes, ir aprendiendo y cogiendo experiencia. No sé por donde va a pasar mi futuro, ya veremos.

Acabas de dejar el deporte  rey en activo hace nada. ¿Lo echas de menos?

Sí, jugar siempre es especial y lo echas de menos, sobre todo a alto nivel. Para quitar un poco el gusanillo juego con los veteranos.

A inicios de curso Depor y Sporting esperaban estar en una situación muy distinta

¿Tu último año en Nueva York, al lado de gigantes de talla mundial como Villa o Pirlo, fue la guinda soñada para tu periplo profesional?

Sin duda que lo fue; siempre me hizo ilusión poder jugar fuera de casa, en Estados Unidos y en una ciudad como Nueva York. Este año lo reunió todo, vivir en el extranjero, poder aprender un idioma como el inglés y el poder compartir vestuario con jugadores de esa talla es muy bonito para un futbolista como yo.

Ya centrados en la competición doméstica, ¿cómo estás viendo la Segunda División?

Al final está siendo una competición marcada por la igualdad y en la que nunca sabes qué equipo que va a estar arriba o abajo. Ha habido y creo que habrá numerosas sorpresas y en las jornadas que quedan puede pasar de todo. 

Impredecible por completo...

Sí, hay equipos de niveles parecidos aunque siempre tienen más presupuesto los que vienen de Primera. Al final todo se iguala, se trabaja tácticamente muy bien y los partidos se definen por pequeños detalles y por las dinámicas de cada conjunto. A veces la calidad marca también la diferencia, porque hay algunos hombres que se salen del nivel de la categoría.

¿Qué opinas del Deportivo-Sporting del sábado?

Sin duda para mí será un partido especial, que va a ser muy difícil para las dos escuadras, que llegan bastante apuradas. Los dos equipos esperaban a inicios de temporada estar ahora mismo en una situación muy distinta a la actual pero es un partido interesantísimo. Riazor va a vivir un gran ambiente, con afición del Sporting en las gradas. Será un partido entre dos grandes equipos de la liga española, que ahora están en una situación difícil.

Después de cuatro partidos sin ganar resurgen las dudas; la cabeza funciona así

Los asturianos llegan un tanto más aliviados en la tabla y después de haberse impuesto 4-0 a la UD Las Palmas.

Esto va semana a semana, venían de perder en Ponferrada 2-0 y parecía que era una hecatombe; ahora logras meter una goleada que anímicamente te ayuda mucho y la gente está mirando para el ‘playoff’. Todo lo que sea puntuar en Riazor será bueno para el Sporting.

¿Qué le está sucediendo al Depor en la presente temporada?

Bueno, la primera parte de la temporada fue desastrosa. El equipo estaba descompensado, había jugadores que todavía no estaban preparados para la Segunda División. Es una categoría muy dura, en la que todo el mundo te puede ganar. Ahora mismo tras la llegada de Fernando Vázquez, que  le ha dado otro empaque, otra moral e impulso al grupo. También han incorporado a refuerzos de categoría y en estos momentos están en la pelea por salvarse. En Navidades tenían quince puntos, hay que valorar en qué punto de la competición se encuentran ahora.

¿Crees que la actual racha de cuatro partidos sin vencer puede regenerar las dudas en el club coruñés?

Sí, claro que resurgen las dudas porque la cabeza funciona así, pero ante las dudas está el trabajo y la fe en lo que estás haciendo. El Depor debe darle continuidad a su convicción y en el momento en el que empiezas a ganar esas dudas se diluyen.

¿La defensa, que este curso ha sufrido demasiados goles, añora a Somma?

Sin duda en todas las categorías y más en Segunda es decisivo mantener la portería a cero porque es muy difícil darle la vuelta a un marcador adverso. Los resultados suelen ser muy ajustados. Djukic comentaba esta semana que el Sporting nunca ganaba cuando le marcaban un gol. En el momento que encajas es muy difícil sumar los tres puntos.

¿Piensas que el Deportivo necesita fichar un central en la vacante del italiano?

No lo sé, no tengo la información suficiente para valorar sobre esto. Veo al Deportivo bastante pero menos de lo que me gustaría.

No creo que haya un favorito, al Sporting le está costando fuera de casa

¿Cuáles son las directrices principales del Sporting de Miroslav Djukic?

Es un equipo típico de Segunda, que intenta no cometer errores graves y estar lo mejor armado atrás posible. Es un bloque solidario pero a pesar de que ha ganado 4-0 este fin de semana su gran déficit está siendo no marcar goles arriba. Creo que le falta velocidad. Ha llegado un extremo que se llama Murilo y que hace cosas importantes pero a ver la respuesta en Riazor. 

Cerca de un millar de hinchas sportinguistas viajarán con su equipo el fin de semana...

Esperemos que sea una fiesta, son partidos que siempre son bonitos para las aficiones. Son ciudades cercanas que siguen mucho a su equipo. Tanto unos como otros seguidores se vuelcan mucho con los suyos, con intensidad, y va a ser una fiesta pero creo que no todos van a salir contentos —bromea—.

¿Te atreves a dar un favorito para el encuentro?

No, creo que va a ser difícil encontrarlo. Ni siquiera el factor casa a favor del Deportivo. Creo que va a ser muy igualado. Al Sporting le está costando mucho trabajo ganar fuera de casa. Lo que sí me atrevo a predecir es que va a ser un partido de pocos goles.

¿Ves a Depor y a Sporting con problemas para mantener la categoría?

No, la verdad es que los veo salvándose pero no con aspiraciones a metas mayores, creo que no llegarán a ‘playoff’ porque se han dejado bastantes puntos por el camino.

Otro de tus equipos, el Lugo, también lo está pasando mal para continuar en Segunda...

Sí, el Lugo transmite mejores sensaciones pero va a tener que pelear hasta el final. También soy optimista para poder salir de la zona de descenso.

Veo a los dos equipos salvándose pero no llegando al ‘playoff’

¿Tus compromisos profesionales te permitirán desplazarte a A Coruña para presenciar el partido o al menos poder verlo por la televisión?

No voy a poder estar en Riazor ni de broma pero el partido creo que lo voy  a poder ver por la televisión. Al menos esto sí que será posible porque no coinciden nuestros partidos al ser de noche.

¿Mantienes contacto con excompañeros en el Deportivo o con el personal del club?

Con los que más hablo es con Antonio Tomas y con Filipe Luis. La semana pasada hablé también con Juan Rodríguez. Con Borja hablo bastante también. Al final pasan muchos años pero sigues conservando las amistades. En A Coruña hice muchos amigos y muy buenos. Fueron unos años muy especiales en mi vida, en los que fui muy feliz. Estoy y siempre estaré muy agradecido a la afición del Deportivo y al club por haberme tratado siempre muy bien. 

Por último, ¿crees que el Deportivo debe seguir la estela del Zaragoza actual, que tras un año gris está sobresaliendo ahora mismo, con muchos boletos para volver a Primera?

Puede ser, esto al final es muy igualado y se trata de acertar. Una vez que lo logras equipos de la talla de Deportivo, Sporting de Gijón o Zaragoza tienen un factor muy a favor y que los diferencia de otros equipos, el disponer de una masa social enorme. Son capaces de llevar  al estadio a más de 20.000 aficionados y eso siempre te da un plus. Es cierto que tienen una presión añadida pero también que disponen de un respaldo importante, que les ayuda mucho a conseguir los objetivos marcados.