Tarragona y Sagunto centraban toda la atención del atletismo este fin de semana. En la antigua Tarraco se celebraba el campeonato de España sub-23 con un nombre propio sobre el tartán, el de Paula Iglesias. Con un doble objetivo. Por un lado, poder revalidar el título de campeona de España sub-23 en los 400 lisos conseguido en pista cubierta y por otro el de conseguir la marca mínima que le diera el pasaporte para el Europeo de la categoría en Suecia. La ciudad valenciana de Sagunto sería la sede del campeonato de España máster, donde los coruñeses tuvieron un claro protagonismo.

En Tarragona, Paula Iglesias centraba la atención coruñesa. En la vuelta a la pista no tuvo problemas para ganar su semifinal con un crono de 55.92 y lograr una calle buena de cara a la final. Final que no lograría su compañera de equipo Inés Oitaven, que no pudo pasar el corte con una marca de 57.90. La misma suerte corrió Blanca Lorenzo, que en el hectómetro paró el crono en 12.96 -1.5 insuficientes de cara a meterse en semifinales. Y lo mismo en los 200 lisos, al no pasar el corte de semifinales con un tiempo de 26.46 -0.4.

La final de 400 tenía un tridente que ya es un clásico en los campeonatos de España desde sub-18: Herminia Parra, Ruth Peña y Paula Iglesias repetían foto en el podio temporada tras temporada. 
Esta temporada, después de la pista cubierta donde dominó la coruñesa con claridad, parecía que se abría el abanico para luchar por la medalla de oro. Al aire libre Ruth Peña dominaba el ránking, pero con Paula Iglesias llegando en un buen momento con 54.89, su mejor marca personal outdoor y con la incombustible Herminia Parra, que paso a paso iba llegando fina a este campeonato, lo que presagiaba una carrera de infarto.

Desde el principio
La final la dominó desde el primer metro Ruth Peña, muy fuerte psicológicamente, con Paula Iglesias a su estela. En la recta de llegada el oro parecía decantado para la madrileña, como así fue, con un crono de 54.28, a sólo cuatro centésimas del récord del campeonato, mientras que la coruñesa sufría en los últimos metros ante el empuje de Herminia Parra. La del Playas la sobrepasó en la línea de meta. 55.12 para Herminia Parra por 55.17 de la del Riazor. La mínima para el Europeo, en 53.80, quedó lejos, pero siempre quedará la posibilidad del relevo largo.

Ana Pajarrón está en un gran momento, en los 400 metros vallas logró el pase a la final al realizar una marca de 1:03.34.

Doble presencia coruñesa en los relevos. En la categoría femenina el cuarteto del Riazor compuesto por Blanca Lorenzo, Paula Iglesias, Ana Pajarrón e Inés Oitavén consiguió la medalla de bronce con un crono de 48.00, a sólo dos centésimas del récord gallego sub-23. Por su parte, el equipo masculino sub-23 del Marineda quedó en séptima posición con una marca de 44.02. El cuarteto estuvo formado por Jordan Vente, Carlos Fernández, Alberto López y Alejandro Botana.