Rafa Nadal señaló que la decisión de renunciar al US Open fue tomada con cautela y debido a la situación sanitaria y a su estado de ánimo y añadió que respeta el trabajo de la ATP y USTA por hacer que el tenis vuelva, y también a los jugadores que decidan acudir a New York porque necesiten el dinero de los premios.
El Nº2 mundial señaló también que sentía la cancelación del Madrid Open, pero entendía que era una decisión “sensata y coherente”, y añadió que no sabe aún si participará en el Masters 1000 de Roma, aunque lleva entrenándose en tierra desde hace meses.
“Como todas las decisiones, al final no se toman a la ligera y hay que consultarlas bien con la gente que tengo al lado y que realmente me importa. Creo que en la situación actual todas las decisiones son válidas. No hay nada que sea seguro o correcto” afirmó sobre el Grand Slam neoyorquino.
“Pero la situación sanitaria es el primer inconveniente a la hora de tomar mi decisión; la situación parece que no está del todo controlada, por lo cual en este caso, consultado con mi equipo decidimos esto”, prosiguió Nadal.
“Segundo, el calendario es complicado después de muchos meses sin competir. Pasar de pista dura a tierra sin apenas tiempo y prepararse se me hace peligroso para mi cuerpo y mi futuro. Luego, un tema de ánimo. La situación está como está, y mi ánimo no estaba como para viajar a New York y competir”, subrayó.
El zurdo de Manacor no quiso entrar en si es correcto que se dispute el US Open debido a la situación que sufre Estados Unidos. “Yo no soy quien para decir si es una decisión acertada o no. Respeto todo el trabajo y la actitud positiva de la ATP y de la USTA por hacer que el tenis vuelva. También respeto a los jugadores que decidan ir, porque tengan por ejemplo una situación diferente y quieran ganar un dinero allí que necesitan”, zanjó.
Mirando a la tierra
Sobre su futuro, la segunda raqueta mundial indicó que “estoy preparándome para la tierra en Europa. Depende de como esté la situación y si todo está bajo control o no. No se si jugaré Roma o no. Espero noticias del nuevo calendario adaptado después de la cancelación de Madrid y a partir de ahí tendré que tomar decisiones”.
Respecto al Madrid Open, Nadal comentó que era “una situación desagradable para la ciudad, y para los organizadores. La situación sanitaria dificulta mucho que se puedan hacer eventos de este calibre con jugadores de todas partes del mundo”, razonó.
“La situación en los últimos días en España podría estar no del todo controlada y con rebrotes, y por lo tanto hay que tener un poquito de paciencia para ver como van las cosas. Un torneo de este calibre no se organiza de un día para otro. Las cosas tienen que ir bien para todos, para los jugadores, los promotores y la ciudad. Si hubiera habido contagios habría salido de una manera nada positiva. Para mi ha sido una decisión sensata y coherente”, sentenció Nadal. l