Argelia derrotó a una peleona Senegal (1-0) gracias un gol en el segundo minuto de partido y alzó su segunda Copa de África, 29 años después de su primera conquista y última aparición en una final continental en 1990. Argelia fue el equipo más regular del torneo y el que mejor juego ha desplegado. El viernes volvió a ser el verdugo de una Senegal que solo ha perdido dos partidos y encajado dos goles en el torneo, precisamente, ante los argelinos: uno en la primera fase y otro en la final.
En las celebraciones en Francia, un total de 198 personas fueron detenidas en diversas ciudades por su participación en altercados asociados a las celebraciones de la victoria de Argelia en la Copa de África frente a Senegal.
El Ministerio del Interior precisó que de esos 198 arrestados, 177 quedaron bajo custodia en comisaría.
La mayoría de las detenciones (102) se produjeron en París, donde miles de personas se concentraron en diversos puntos de la ciudad al término de la final, y en particular en los barrios de los Campos Elíseos y de Barbès, donde vive una importante comunidad de origen argelino.
Los primeros choques en los Campos Elíseos con los hinchas argelinos se produjeron, según Le Parisien, poco antes de la 1 de la madrugada. Las fuerzas del orden lanzaron gases lacrimógenos hacia la parte alta de la avenida.
En Barbès, desde última hora de la tarde del viernes algunas calles estuvieron literalmente ocupadas por una multitud que vio el partido en el exterior a través de las pantallas de bares. Alguna bandera argelina gigante seguía todavía colgadas ayer por la mañana en ese barrio. Los cláxones de coches cuyos ocupantes circulaban mostrando con orgullo la bandera argelina se prolongaron buena parte de la madrugada.