El Mirandés retomó los entrenamientos ayer para preparar la última semana de la temporada, que los pupilos de Andoni Iraola afrontan sin ningún tipo de presión después de haber asegurado la permanencia ya hace tiempo y tras haber perdido prácticamente cualquier opción de disputar el playoff de ascenso con su derrota de la pasada jornada en casa de la UD Las Palmas (1-0).
A la escuadra de Miranda de Ebro le esperan dos duelos precisamente con dos conjuntos inmersos en la pelea por la permanencia. El viernes, en Anduva, se enfrentan al Deportivo y el próximo lunes viajan al Anxo Carro para medirse al Lugo, que ahora mismo es quien marca el descenso, con dos puntos menos que el conjunto coruñés.
Los rojillos disfrutaron de dos días de descanso tras el encuentro en Gran Canaria, y volvieron ayer al Campo 2 de Anduva con la intención de reactivar de nuevo las piernas para las próximas citas.
La sesión siguió el habitual plan de recuperación, con estiramientos, rondos y ejercicios de posesión, previo a la jornada de hoy, en la que la plantilla volverá al verde para continuar su preparación, ya con un entrenamiento más intenso.
La plantilla burgalesa tiene previsto ejercitarse también mañana a las 10.00 horas, y su última sesión antes del duelo con el Depor será el jueves en horario vespertino, a las 18.00.
Los de Andoni Iraola llegan al duelo con el Deportivo tras haberse desinflado en las últimas semanas, pero sin ningún tipo de presión, lo que les convierte en peligrosos.