El Girona, obligado a volver a la senda del triunfo para no alejarse más de la parte alta de la tabla de Segunda, se reencontró con la victoria al imponerse a la UD Las Palmas con un gol de penalti Cristhian Stuani.

El cuadro catalán, uno de los grandes candidatos al ascenso, ha conseguido los diez puntos que ha sumado hasta ahora en Montilivi, pero deberá mejorar lejos de casa si quiere pelear por regresar a la máxima categoría del fútbol español. La igualdad entre ambos conjuntos, así como la inexistencia de ocasiones claras de gol, fue la nota dominante de una primera parte soporífera en algunos tramos.

Los locales, deprimidos por las dos derrotas encajadas ante el Cádiz y el Almería en la última semana y frustrados por la incapacidad de dar respuesta de momento a las ingentes expectativas creadas alrededor del equipo, se mostraron demasiado planos y nerviosos, para desesperación de una hinchada que en varios tramos del duelo silbó a su equipo.

En el primer acto se evidenciaron las carencias defensivas de un Girona al que, en este arranque de temporada, parece que puede hacérsele daño con demasiada facilidad.

El tanto local llegó en el minuto 64, cuando Stuani transformó un penalti cometido por Álvaro Lemos para darle al Girona la victoria.