Sol naciente para el Depor
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Sol naciente para el Depor

Sol naciente para el Depor
CAF1821. BELO HORIZONTE (BRASIL), 24/06/2019.- El jugador Gaku Shibasaki (d) de Japón disputan el balón con Jhegson Mendez (i) de Ecuador durante el partido Ecuador-Japón del Grupo C de la Copa América de Fútbol 2019, es

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Nipón significa origen del sol y el Deportivo ya tiene a su primer jugador de ese país, el del sol naciente. Desde Japón llega al conjunto coruñés Gaku Shibasaki, que a la segunda ha logrado el objetivo de vestir la elástica blanquiazul.

El Deportivo anunció el fichaje del hasta ayer jugador del Getafe Gaku Shibasaki, que se ha comprometido con la entidad deportivista por cuatro temporadas.

El conjunto herculino explica que deberá abonar traspaso al Getafe solo en caso de ascenso (ojalá tenga que hacerlo) al final de la presente temporada, de lo que se deduce que se incorpora a coste cero, y por tanto solo consume del limitado tope salarial del Deportivo en Segunda la parte correspondiente a su salario.

Para el conjunto coruñés, es el primer japonés; para el jugador nipón, el Deportivo es el tercer club al que defenderá en España, donde previamente vistió las elásticas del Tenerife, en Segunda, y el Getafe, en Primera. De los insulares a los azulones pasó en el verano de 2017 tras haber perdido la final del playoff de ascenso ante el Getafe.

El futbolista ya estuvo cerca de recalar en el Deportivo en el mercado invernal, pero no pudo ser incorporado en aquella ventana de fichajes porque, con el acuerdo con el jugador y el Getafe cerrados, el club madrileño, a instancias de su entrenador, José Bordalás, puso como condición encontrarle un sustituto en el mercado y ese fichaje por parte del conjunto azulón no logró cristalizar.

Luces y sombras
El japonés puso fin con su fichaje por el Depor a dos temporadas de luces y sombras en Getafe marcadas por algunas buenas actuaciones y partidos para olvidar, pero también con el orgullo de haber formado parte de la histórica plantilla que finalizó quinta la última campaña.

Gaku llegó a Getafe en 2017 como un refuerzo exótico para el centro del campo. Su aterrizaje en el Coliseum Alfonso Pérez vino acompañado de una buena nómina de periodistas nipones dispuestos a contar las hazañas de uno de sus futbolistas más internacionales y que durante dos temporadas no han faltado a su cita quincenal en el coliseo azulón.

Su trayectoria en el equipo madrileño fue de más a menos. Empezó jugando mucho y siendo protagonista, como con aquel gol de volea que le marcó al Barcelona en el Coliseum el 16 de septiembre de 2018. En ese mismo encuentro, unos minutos después de celebrar su primer tanto en la Liga española, se lesionó y estuvo dos meses y medio fuera.

Tras recuperarse volvió a jugar contra el Eibar, en un duelo que fue todo un homenaje a Japón por parte de la Liga y en el que compartió protagonismo con otro compatriota, Inui, en las filas del conjunto vasco.

Sin embargo, su llama, con el paso de las jornadas, fue apagándose. Alternó titularidad con suplencias aunque pudo disfrutar de la experiencia de jugar en estadios como el Camp Nou, Santiago Bernabéu o el Sánchez Pizjuan, pero en algunos casos con actuaciones discretas.

La siguiente temporada (la pasada), José Bordalás lo relegó a un segundo plano y en los despachos del club se le colgó el cartel de transferible, aunque de puertas hacía afuera siempre se negó.

Las lesiones, la competencia en su posición, la apuesta de Bordalás por jugar con dos delanteros en muchos partidos y su desconexión con la plantilla a mitad de curso por su marcha a la Copa Asia marcaron una temporada en la que solo disputó nueve encuentros.

Aún así, en el tramo final de campeonato, con el Getafe tratando de mantener la cuarta plaza de la clasificación, Bordalás apostó por él de inicio en partidos importantes frente a Sevilla, Real Sociedad, Barcelona y Villarreal.

Como uno más, terminó el curso celebrando una histórica quinta plaza en la clasificación aunque consciente de que su presencia la siguiente temporada en Getafe se antojaba difícil.

En el Deportivo, y con el reto de ascender a Primera, Gaku Shibasaki está llamado a ser uno de los protagonistas. Los minutos no se los van a regalar y la exigencia va a ser la misma, puesto que detrás hay una ciudad entera volcada y con el objetivo del ascenso.

A sus 27 años, y tras disputar la Copa América con Japón en Brasil, su fichaje por el Deportivo, al que se incorporará en unos días, le llega en el momento de mayor madurez de su carrera profesional.

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