El 'celtic pride' (orgullo céltico) asomó en la segunda mitad del cuarto partido de la serie ante los Heat para evitar la 'barrida' y, de paso, que por primera en la historia de la NBA las dos finales de Conferencia acabasen con 4-0.
El 99-116 devuelve a los Celtics la esperanza de, en principio, alargar la serie, y, muy al final, de conseguir el milagro de los milagros: remontar un 0-3, algo que no ha ocurrido en las 150 veces que se ha dado. Eso sí, tres equipos lograron forzar el séptimo partido. El de esta eliminatoria sería en Boston.
Primera parte igualada. Los Heat se anotaron el primer cuarto (29-23) y empataron el segundo (27-27), que acabó con canasta de Caleb Martin (16 puntos).
Un triple de Max Strus dio a los locales su máxima renta (61-52). Y ahí se les apagó la luz. Los de Joe Mazulla firmaron un parcial de 0-18, con la mitad de los puntos por cortesía de Jayson Tatum (33, 11 rebotes, 7 asistencias y 2 tapones). El alero enroscó 4 (de 9) triples en el partido y con ello desbancó a Paul Pierce del Nº1 de la lista de triplistas de los Celtics en playoffs.
Tocados, pero no hundidos. Los Heat capearon el temporal de bombazos lejanos -un total de 7 en este periodo- que les cayó encima con la aportación prácticamente en solitario de Jimmy Butler (29 tantos, 9 capturas y 5 pases de canasta).
Con 79-88 arrancó el último cuarto. Y cuando los de Erik Spoelstra estaban acercándose (83-88), les cayó el golpe definitivo, en forma de 0-12 de parcial. Más triples y mucha defensa de los 'orgullosos verdes'. En la secuencia ganadora hubo tres tapones: de Derrick White (16 puntos) a Duncan Robinson, de Grant Williams (14 –4 de 6 desde el arco– y 6 rechaces) a Butler y de Tatum a Gabe Vincent. En tres jugadas consecutivas, que al otro lado de la pista se transformaron en 7 puntos.
Punto final anticipado. Ganas de vivir de un equipo que convirtió el 40% de sus lanzamientos de larga distancia (18 de 45), frente al paupérrimo 25% (8 de 32) de un rival que le había martirizado desde el arco en el tercer encuentro: 19 de 35 (54.3%), por el triste 11 de 42 (26.2%) del Nº2 del Este.
Soso partido de un Bam Adebayo (10 puntos, con solo 7 tiros a canasta, y 5 rebotes) que había recuperado su nivel de All-Star, mientras que Al Horford, atrapado en un túnel desde el inicio de la serie, por fin vio la luz: 12 tantos –3 de 6 en triples–, 7 capturas y 4 asistencias.
