Los Nuggets no acusaron el largo –y siempre temido– parón, en su caso de nueve días entre el cuarto partido contra los Lakers y el primero frente a los Heat, que sí notaron las apenas 48 horas de descanso tras liquidar en siete partidos a los Celtics.
El 104-93 final es un marcador engañoso. Los pupilos de Michael Malone se impusieron con mucha autoridad. El 4-5, tras un triple de un tibio Jimmy Butler (13 puntos –6 de 14 en tiros de campo–, 7 rebotes y 7 asistencias), fue la única ventaja en todo el partido de los de Erik Spoelstra, que en estos playoffs habían ganado el primero de las eliminatorias ante Bucks, Knicks y Celtics.
Una racha que murió a manos de la fiabilidad de los Nuggets como locales en esta postemporada: siguen invictos tras 9 partidos disputados en el Ball Arena.
Jamal Murray fue el jugador de la primera mitad (59-44), fase en la que anotó 18 de un total de 26 puntos, que acompañó con 6 rebotes y 10 asistencias. Con Aaron Gordon (16 tantos –7 de 9 en tiros de dos– y 6 capturas) alimentado por Nikola Jokic para anotar cómodamente ante pares inferiores físicamente. El serbio, que llegó al descanso con 10 puntos, 10 pases de canasta y ningún balón perdido, merece un capítulo aparte.
Acabó el encuentro con 37 tantos (8 de 12 en tiros de campo y 10 de 12 en libres), 10 rechaces y 14 asistencias. En este útimo apartado nunca antes se había alcanzado dicha cifra en su primer partido de unas Finales. Tampoco ningún pívot en un duelo de una serie por el anillo. LeBron James fue, siete años antes, el último jugador que llegó a los 10 pases letales en los dos primeros cuartos de un encuentro de unas Finales.
Para redondear su sexto triple-doble en los últimos siete partidos, el noveno en 15 partidos en esta postemporada, el 'Joker' sofocó, con 4 puntos seguidos, el que sería último acercamiento de los Heat (84-74), después de un parcial de 0-14 de salida en el último cuarto, elaborado con cuatro triples y una canasta de dos.
Huérfanos del mejor Butler, los visitantes aguantaron lo que pudieron gracias a Bam Adebayo (26 puntos, 13 rebotes y 5 asistencias) y Gabe Vincent (19 –5 de 10 desde el arco– y 5 pases letales). Porque los dos otros titulares simplemente no estuvieron. Caleb Martin se quedó en 3 tantos, con 1 de 7 en tiros de campo, y Max Strus ni siquiera anotó: 0 de 9 en triples y 0 de 1 en tiros de dos.
Un primer capítulo del color dorado de las pepitas de oro y que dejó un sorprendente récord negativo: los Heat solamente lanzaron dos veces de la línea de 4.60 metros. Ocho faltas le fueron señaladas en 48 minutos a los locales, que volverán a serlo en el segundo episodio.