Si nos atenemos a la historia, ya tenemos Finales. Sólo es cuestión de tiempo que se confirme. Por el Oeste, los Nuggets; por el Este, los Heat, que en su primer partido en casa fundieron (128-102) a los Celtics.
 

Los dos equipos más laureados de la historia de la NBA están con 3-0 en contra. Son ya 151 veces que se da esta situación. Y en las 149 anteriores no hubo un sola remontada. 

Nunca antes las dos Finales de Conferencia han acabado con 4-0. No obstante, y visto lo visto en Miami (y en Boston), no parece que los 'orgullosos verdes' vayan a contribuir a evitarlo. Hay detalles que lo prevén. Como que Jimmy Butler hizo su peor partido de estos playoffs (16 puntos, 8 rebotes y 6 asistencias) y los Heat lograron su victoria más amplia. Tampoco estuvo brillante Bam Adebayo (13 tantos y 3 capturas).
 

La pizarra de Erik Spoelstra –no se habla lo suficiente de lo grandísimo entrenador que es–, la defensa y tres secundarios manejaron el partido. Los Celtics duraron poco más de 10 minutos. Encajaron un parcial 9-2 en el tramo final del primer cuarto (30-22) y no volvieron a acercarse a menos de 7 puntos.

La renta de los Heat creció como un reloj hasta el descanso (61-46). Y en el tercer acto marcaron la misma diferencia que en los dos primeros juntos (32-17). Los Celtics dimitieron definitivamente encajando un parcial de 18-6 en los primeros minutos, al que el MVP de la noche, Gabe Vincent, colaboró con 8 tantos. Acabó el encuentro con 29 y 6 de 9 desde el arco, donde también estuvieron finos el renacido Duncan Robinson (5 de 7 y 22 tantos) y Caleb Martin (4 de 7 y 18). 

La paliza también lo fue en este apartado del juego. Los locales convirtieron el 54.3% de sus triples (19 de 35) y los visitantes un feo 26.2% (11 de 42; 1 de 13 en el tercer cuarto). Boston ni siquiera fue capaz de sacar partido a su abrumador dominio del rebote (35-57). 

Grant Williams (12 puntos) fue el único pupilo de Joe Mazzulla que se salva de la quema. Mal partido de los Jay. Tatum hizo 14 tantos –5 de 11 en tiros de dos y 1 de 7 en triples– y Brown sumó 12 unidades, con 0 de 7 desde larga distancia. Hasta alguien tan fiable como Malcolm Brogdon tuvo una noche aciaga: 0 de 6 en tiros de campo. 

Cifras de un equipo caducado, derrotado. Que, de nuevo en el Kaseya Center, tendrá la misión de evitar el cuarto 0-4 de su historia. El último fue en la temporada 2014/2015, en primera ronda y a manos de los Cavs. En la misma instancia de la 2003/2004 su verdugo fueron los Pacers. La primera vez, en la 1982/1983, los Bucks los barrieron en semifinales de Conferencia.