España disputa este miércoles ante Irán un duelo en el que no solo se juega el pleno de victorias, sino allanar el camino a la segunda fase del Mundial. 
 

Los caminos del equipo persa y el ibérico vuelven a cruzarse en la última jornada de la fase de grupos de la Copa del Mundo. Ya en China 2019, cuando ‘La Familia’ se proclamó campeona, ambos combinados se enfrentaron en un partido igualado que acabó cayendo del lado español (73-65). 
 

En esta ocasión el encuentro se presenta como la gran oportunidad de seguir mejorando, la frase más repetida por Sergio Scariolo, de pulir los detalles, de asentarse como rival a tener en cuenta y, por su puesto, de no complicarse sobre manera el pase a cuartos.
 

Los dos buenos choques ante Brasil y Costa de Marfil permiten a la también actual campeona de Europa encarar el último de la primera fase de grupos con cierta confianza ante un rival más débil y que no debería suponer un problema serio para los de Scariolo. 
 

Eso sí, debido al sistema de clasificación en el que se arrastran resultados, España necesita la victoria para poder llegar con mayor tranquilidad a la segunda fase del torneo, en la que se medirá a Letonia y Canadá tras la inesperada eliminación de Francia.

El futuro es presente

El gran partido de la nueva generación española frente a los brasileños (78-96), con protagonismo de Juan Núñez, permite preparar el choque con cierto optimismo, con una aire renovado tras los duros golpes recibidos, personificados en las bajas de Lorenzo Brown y Ricky Rubio.
 

“No hay dudas de que está llamado a liderar este equipo los próximos diez años. Tiene liderazgo, juego, creatividad... es un jugador franquicia”, dijo el seleccionador en la rueda de prensa posterior a la exhibición de Núñez ante Brasil.
 

Santi Aldama y Usman Garuba, junto a un gran Alberto Díaz, acompañaron a la perfección la gran exhibición de un Núñez que está debutando en su primer mundial con diecinueve años de edad. 
 

El futuro de la selección es ya el presente, y ante Irán podrá seguir carburando para el verdadero desafío, que comienza a partir de este viernes en el mismo Indonesia Arena de Yakarta y que continuará, siempre y cuando se selle el billete a los cuartos de final, en Manila.
 

En los dos primeros encuentros de España, Willy Hernangómez ha repetido su rol del pasado Europeo y se erige con la gran figura del equipo. El ex Real Madrid y nuevo jugador del Barça promedia 18 puntos y casi 60% en tiros de campo, con 17.5 créditos de valoración, escoltado por el jovencito Núñez (17.0).