En Zaragoza iniciaron ayer lunes el derribo del fondo sur del Estadio de La Romareda para iniciar con prontitud las obras del nuevo recinto deportivo de cara al Mundial 2030 que se celebrará en nuestro país, junto a Portugal y Marruecos, y que tendrán una duración de 54 meses.
La alcaldesa de la capital mañana, Natalia Chueca, y el presidente del Gobierno de Aragón, Jorge Azcón, encabezaron un acto al que asistieron otras autoridades y empresarios de dicha comunidad autónoma.
Lo sucedido ayer en Zaragoza se vivirá próximamente en A Coruña con los representantes del Ayuntamiento y la Xunta de Galicia. Es alentador ver a los representantes políticos alcanzar entendimientos que beneficien a la ciudadanía. Como dice el dicho, “lo que ha unido el fútbol, que no lo separe el hombre”.